El Congreso estadounidense corroboró el triunfo electoral de Donald Trump de cara a su investidura para un segundo mandato.
En una sesión conjunta de menos de una hora y bajo un escenario completamente diferente a la insurrección del 2021, la vicepresidenta del país, Kamala Harris, recibió y verificó uno a uno los recuentos por estado “regulares y auténticos”, para declarar que el magnate y JD Vance obtuvieron 312 votos, superando a la fórmula demócrata que ella lideró junto a Tim Walz, lo que desató la euforia republicana, pues no hubo reclamos, lo que se selló con un apretón de manos entre la número dos y el líder de la Cámara de Representantes, Mike Johnson.
Por separado, el magnate elogió que sería un “gran momento en la historia” y luego aprovechó sus redes sociales para lanzarse contra el gobierno al recriminar a Joe Biden por obstaculizar la transición para que sea “lo más difícil posible”.
En tanto, el Ejecutivo federal y congresistas pidieron no olvidar el episodio violento, en especial ante los indultos que se prevén para cientos de insurrectos.