Al insistir que hay países que se aprovechan de Estados Unidos, el presidente electo, Donald Trump, alista la creación de un organismo especial para “recaudar aranceles” del exterior, sin aludir a algún socio por los supuestos abusos.
En su cuenta de Truth Social, el también empresario busca contrarrestar lo que ve como acuerdos “blandos y patéticamente débiles” en materia comercial al sentenciar “comenzaremos a cobrarles a quienes ganan dinero a costa de nosotros”, con el antecedente de que en su primer gobierno (2017-2021) recaudó millones de dólares en el país.
A días de asumir un segundo mandato, refirió que pagos como el Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas e inglés), dirigido a su población, serán más justos al apuntar a externos y de-sembolsos por importaciones, lo que denominó Servicio de Ingresos Externos.
Con ello, el republicano dejó en evidencia en su plataforma que considera que la potencia hace mucho por el mundo, pero no hay reciprocidad, al insistir que “comenzarán a pagar, finalmente”. Sin embargo, no ofreció detalles, lo único confirmado es que se pondrá en marcha el próximo 20 de enero al convertirse en el presidente 47 de la nación, fecha en la que el líder del movimiento Make America Great Again (MAGA) prometió cambios radicales como la mayor deportación de migrantes en la historia de EU.
Su anuncio generó múltiples dudas sobre su operación e impacto en la región y a nivel mundial, pues, aunque creen que haya más recursos, economistas prevén a largo plazo un impacto negativo por un aumento de precios, lo que afectará a personas de bajos recursos.
Es hora de que eso cambie. Anuncio que crearé el servicio de ingresos externos para recaudar nuestros aranceles, obligaciones y todos los ingresos que provienen de fuentes extranjeras. Comenzaremos a cobrarles a quienes ganan dinero a costa de nosotrosDonald Trump, Presidente electo de Estados Unidos
Y se suma la incertidumbre de si habrá una nueva oficina o una de reemplazo, ante el plan sugerido por asesores como Steve Bannon, quien estuvo preso en plena campaña electoral por desacato; el proceso de gestión de obligaciones comerciales y multas está a cargo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), dependiente del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), pero se abre la puerta a delegarlo.
Al respecto, el diario The Washington Post reveló, según una fuente anónima, que podría cambiar el nombre a una de las oficinas del Tesoro, departamento que quedará en manos de Scott Bessent a partir de la otra semana; pero surge la posibilidad de que recaiga en otro, como el de Comercio, en el que Trump designó a Howard Lutnick, lo que indica más burocracia y va en contra de sus lineamientos con la inminente apertura del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) que liderarán juntos el multimillonario Elon Musk y el político Vivek Ramaswamy enfocados a reducir costos, lo que incluye despidos.
Además, esta nueva política rememora los amagos que lanzó repetidamente Donald Trump en campaña y tras las elecciones. Sus principales blancos fueron México y Canadá, a los que amenazó con imponer impuestos graduales de 25 y hasta 100 por ciento si no atienden sus reclamos en disputas migratorias, comerciales y de seguridad, por el flujo de drogas en sus fronteras, así como China, régimen con el que fue más directo al anticipar aranceles a sus productos de hasta 60 por ciento, evidenciando la competencia y roces entre Washington y Beijing, como en su primera gestión.
Esa intimidación arrastró a una crisis a Canadá, su vecino del norte, pues ante la presión el primer ministro, Justin Trudeau, renunció al liderazgo liberal y al gobierno a la espera de nombrar a un sucesor, y justamente éste fue el primero en reaccionar a su reciente anuncio y convocar a una reunión de emergencia.
Ésta se llevará a cabo el mismo día de la investidura y está enfocada “de manera inquebrantable, en la protección y defensa de los intereses canadienses”, según un comunicado, lo que alude a las amenazas arancelarias del magnate y de convertir a uno de sus principales socios en el estado 51 de EU, lo que ya rechazó enfáticamente Ottawa.
En tanto, horas antes de acaparar reflectores con su plan, Donald Trump fue exhibido con la publicación de la primera parte de un informe del Departamento de Justicia en su contra por las acusaciones de interferencia electoral.
La conclusión del fiscal especial, Jack Smith, es que de no haber triunfado en la elección pasada el conservador habría sido condenado, ya que “las pruebas admisibles eran suficientes para obtener y sostener una condena”, pero el caso fue frenado por la inmunidad que le otorgó la Corte, pero el supervisor recalcó que Donald Trump “no fue exonerado” y defendió su actuar al sostener que sí hubo una conducta criminal para presentar cargos, lo que respondió el republicano tachándolo de “desesperado” por divulgar el material de más de 100 páginas en plena madrugada.
“Aranceles matan libre comercio”; la SRE ya negocia el tema con EU
Luego de que el próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara la creaciòn de un órgano para recaudar aranceles del extranjero a partir del 20 de enero, el secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, advirtió ayer que gravámenes matarían el libre comercio.
“Creo que los aranceles, en primer lugar, si impones aranceles, matas el libre comercio, porque o tienes aranceles y pasas a un modelo proteccionista, o fortaleces el tratado de libre comercio. La pregunta que yo plantearía es, ¿por qué no analizamos las cifras de forma objetiva, rigurosa? ¿Qué ha aportado el libre comercio a las tres naciones en los últimos años? Este T-MEC fue creado por el presidente Trump durante su primer mandato, y fue una buena idea, porque ha funcionado”, destacó durante una visita a Phoenix, Arizona.
Indicó que, más allá de una salida arancelaria, lo que se requiere es fortalecer la alianza de libre comercio que hay y que ha dado buenos resultados. Sobre acercamientos con republicanos, el funcionario informó que sí se está interactuando “con algunos de ellos de manera informal”, pues algunos ni siquiera han sido ratificados.
Sin embargo, afirmó que se mantendrá la comunicación, ya que “tenemos que sentarnos a hablar y llegar a algunos acuerdos en algún momento”.
Sobre el amago de deportación masiva, el canciller agregó que México está preparado para recibir a los migrantes que puedan ser deportados, con los brazos abiertos asegurando que tendrán acceso a empleo, salud y apoyo integral.
“Ésta es una decisión política del Gobierno de la Presidenta Sheinbaum, y se está instrumentando. Así que, no conocemos cuál va a ser la magnitud exacta ni la dinámica, pero por supuesto, nuestras y nuestros paisanos no están solos, no van a estar solos, y si deciden regresar o se ven precisados a regresar, pues se encontrarán en México, su tierra, su país que los recibe con hospitalidad, con posibilidades de empleo, con apoyo en materia de salud”, indicó.
Además, señaló que ante la posible deportación de connacionales, el Gobierno federal tiene una estrategia legal basada en el derecho internacional, el derecho estadounidense y, en algunos casos, en leyes estatales. Entonces, djo, se requiere una diversidad de equipos jurídicos.
Mencionó que la visita de trabajo servirá para reunirse con autoridades migratorias y “mostrarles el verdadero interés que tiene el Gobierno de México de mantener esta relación cordial, coordinada y de cooperación con los estados fronterizos y con todos los estados de la Unión Americana”.
RECONOCE A CONNACIONALES. En su conferencia matutina, la Presidenta Claudia Sheinbaum refrendó la defensa que ha hecho de los connacionales mexicanos, ante los amagos de una deportación masiva por parte del gobierno estadounidense entrante. Recordó que los migrantes mexicanos hacen una aportación “muy grande” a la economía estadounidense.
“Imagínese (…) 65 mil millones de dólares llegaron de remesas, y eso es 20 por ciento de todo lo que ellos aportan o de todo lo que ellos reciben o ahorran. Entonces, 80 por ciento se queda en Estados Unidos. Y ellos pagan impuestos y muchos de ellos están en la seguridad social. Entonces, hay una aportación de las y los mexicanos a Estados Unidos muy grande”, comentó.
En este contexto, reconoció a los connacionales y mostró su solidaridad en medio de los señalamientos de que son “delincuentes” realizados por Trump: “Nuestro reconocimiento por lo que hacen las y los migrantes para México; la solidaridad que tienen con sus familias, la fraternidad que significa el que no abandones a tu familia, el que siempre estés atento de tu familia, que son estas remesas y el apoyo que le dan a nuestro país con ello, pero aportan más a la economía de Estados Unidos”.
Sheinbaum Pardo ejemplificó que siete de cada diez trabajadores del campo son mexicanos o de origen mexicano. “En el sector de la construcción, muchísimos mexicanos; en el sector servicios, bueno, Nueva York, por ejemplo, la migración de Puebla, de Oaxaca, hace funcionar en muy buena parte una ciudad tan importante para Estados Unidos”, agregó.
La mandataria señaló que la defensa se realizará “siempre y cuando estemos en pláticas formales con el gobierno de Estados Unidos también lo haremos”.
La mandataria también reveló que no ha sido invitada a la toma de protesta de Trump a la presidencia de Estados Unidos este 20 de enero, pero aseguró que “no pasa nada”; además, refirió que la representación de México la encabezará el embajador Esteban Moctezuma.
Para la toma de protesta, el republicano invitó de forma personal a diversos jefes de estado que comulgan con su ideología, entre ellos a Javier Milei, presidente de Argentina; de El Salvador, Nayib Bukele y de Ecuador, Daniel Noboa.
Al finalizar la conferencia de prensa matutina, la jefa del Ejecutivo federal insistió en que “no pasa nada. Estará ahí el embajador de México en Estados Unidos, no hay problema”.