Israel y Hamas acordaron un alto al fuego para liberar a 98 rehenes atrapados en Gaza hace 15 meses, aunque faltan temas por definir.
Luego de intensas y esperanzadoras negociaciones, mediadores confirmaron la tregua con la confianza de sanar el dolor por la masacre terrorista y las 46 mil muertes palestinas. Con 467 días de guerra a cuestas en Medio Oriente, el primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman al Thani, reveló que el cese al fuego pactado junto a Egipto y Estados Unidos entra en vigor el próximo 19 de enero, un día antes de la transición en EU.
El anuncio desató furor en Gaza y en Israel; los primeros ven la oportunidad de volver mientras familias judías enfrentan sentimientos encontrados ante el inminente retorno de hijos, padres o hermanos, pues son conscientes de que no todos volverán con vida.
De acuerdo con filtraciones, el acuerdo arranca con la liberación gradual de 33 cautivos durante seis semanas, al priorizar a niños, mujeres soldado y ancianos, a cambio de presos palestinos, como sentenciados a cadena perpetua, mientras 65 víctimas prolongarán su encierro en condiciones inhumanas, según sobrevivientes. Lo que genera incertidumbre ante el temor de que se viole el proceso o traten de corregir la tregua en la que Tel Aviv aparentemente cedió más, pues liberará a casi una decena de criminales por cada israelí, superando el balance del trato en 2023 cuando recuperó a 100, en su mayoría mujeres, por 240 rivales.
Por ello, deudos amagan que no descansarán hasta ver “al último rehén de vuelta”, según un mensaje de la cuenta Bring home now (tráiganlos a casa ahora) y las Fuerzas de Defensa alistan el operativo que denominaron “Alas de Gorrión”.
Las familias externaron que, aunque sienten alivio, no creerán hasta reencontrarse con sus seres queridos, escenario ante el que líderes admiten que falta lo peor, por una realidad en la que no todos volverán con vida, pues se calcula que la tercera parte murió en cautiverio. El presidente Isaac Herzog dijo que la tregua, una obligación mortal, será desafiante al desatar dolor, mientras que el exvocero del ejército Gabriel Chocron precisó que “no sabemos cómo van a regresar de salud, mente y espíritu”, al recordar el trauma de quienes estuvieron alrededor de 50 días retenidos, pues quienes siguen llevan nueve veces ese tiempo.
Y resalta que quedarán pendientes más pasos para un cese permanente y la reconstrucción. Tras la intensa negociación de las últimas 96 horas, según fuentes de EU, al avanzar se pondrán en marcha más acciones, pues se prevé que el día 16 reanuden conversaciones para el retiro gradual de las tropas en Gaza, así como la entrega de rehenes con vida y, finalmente, los cadáveres de los otros.
En tanto, dirigentes se acreditan el logro, pues tanto Joe Biden como Donald Trump presumieron ser un factor.
El magnate y líder electo de EU, Donald Trump, publicó en Truth Social que este acto “épico” fue por su victoria electoral al alardear “hemos logrado tanto sin siquiera estar en la Casa Blanca”, tras amagar a Hamas con desatar un “infierno” si no devolvía a los secuestrados.
Horas después, el jefe de Estado, Joe Biden, reconoció el acto para poner “fin permanente a la guerra” tras sufrimiento en ambos bandos al destacar que todo se basó en un plan que presentó desde mayo pasado ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU).
Más tarde, escoltado por su número dos, Kamala Harris, y Anthony Blinken, secretario de Estado, dijo que se abre la puerta a un nuevo capítulo tras el debilitamiento de actores en la región, como Irán —patrocinador de Hamas— y Siria.
En tanto, el premier acusado de genocidio, Benjamin Netanyahu, agradeció vía telefónica a ambos por su colaboración en esta “misión sagrada”.
