El Tribunal del Distrito Occidental de Seúl autorizó el domingo la prórroga de la detención del expresidente surcoreano Yoon Suk Yeol, quien se encuentra en prisión bajo investigación por insurrección y abuso de poder tras su declaración sorpresiva de la ley marcial el 3 de diciembre de 2024.
La decisión se tomó debido al riesgo de destrucción de pruebas en el marco de la investigación, que se centra en los hechos ocurridos cuando Yoon ordenó el envío de tropas al parlamento para evitar la anulación de su decreto.
La prórroga de su detención, que le permite permanecer bajo custodia hasta por 20 días adicionales, incluye los días ya transcurridos desde su arresto el pasado miércoles. Durante este tiempo, la Oficina de Investigación de la Corrupción de Altos Funcionarios (CIO) planea entregarlo a la Fiscalía, que podría imputarlo formalmente en los próximos días.
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Frente al tribunal, el día de la decisión, miles de manifestantes se agruparon, algunos a favor de su liberación, mientras otros celebraron el fallo judicial.
A Yoon le imputa haber desestabilizado el país con su decisión de declarar la ley marcial, lo que resultó en la invalidación temporal de la Asamblea Nacional y en la movilización de tropas hacia el parlamento.
Esta medida fue vista por muchos como un intento de retener el poder y evitar su destitución. Yoon, que ya fue suspendido de sus funciones por el parlamento el 14 de diciembre, ha negado las acusaciones y se ha mostrado reacio a colaborar con los investigadores, de forma que, incluso, se ha negado a ser interrogado en varias ocasiones.
Si es hallado culpable de insurrección, Yoon podría enfrentar penas severas, incluida la cadena perpetua o incluso la pena de muerte.
Con información de Reuters y Europa Press.
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