El primer intento de Estados Unidos de deportar a migrantes colombianos desató un fuerte choque comercial con la imposición de aranceles y descalificaciones tras el bloqueo a vuelos militares con ilegales expulsados. Y tras horas de tensión se superó “el impasse”.
La mañana de ayer, Gustavo Petro, presidente de Colombia, “desautorizó” el ingreso de dos aeronaves de EU por el trato inhumano a compatriotas tras documentarse que iban esposados como el caso de Brasil; rápidamente su homólogo y quien recientemente volvió a la Casa Blanca, Donald Trump, atajó el choque al imponer aranceles de 25 por ciento y más sanciones por el desafío a su política antimigrante y la mayor deportación para la historia de EU.
Durante horas, los líderes protagonizaron un largo y agresivo enfrentamiento en X y Truth Social para mostrar que no se doblegarían en materia migratoria y usarían al adversario como ejemplo. Ambos impusieron aranceles para hacer respetar sus condiciones y, finalmente, al cierre de esta edición, resolvieron sus diferencias para reanudar las devoluciones de “invasores”.
Jamás aceptaremos que se nos impongan condiciones, afirma Gustavo Petro
La Casa Blanca fue la primera en alardear que Colombia “ha aceptado todos los términos del presidente Trump”, incluyendo el traslado en aviones militares, pese a que Bogotá exigió que fueran civiles y ofreciera la aeronave presidencial para ello; según un comunicado, se congelan las sanciones al advertir que estarán en reserva en caso de que ese país “no cumpla” lo acordado.
En tanto, la Cancillería latina dijo tras los jaloneos hay un acuerdo para facilitar las repatriaciones “garantizándoles condiciones dignas”, aunque no se especificó si habrá cambios o volverán esposados, mientras Brasil exigió una explicación por tal conducta y siguen las deportaciones, como a México y Guatemala.
Cabe destacar que EU fue el más directo con un golpe económico. El magnate dijo que los aranceles escalarían a 50 por ciento, habría sanciones financieras e inspecciones aduaneras y se revocarían las visas del círculo cercano del “socialista” al vetar el ingreso de funcionarios, familiares y simpatizantes, luego de que la prensa adelantara la suspensión de esos trámites, lo que Donald Trump calificó como “sólo el comienzo”.
Pese a su resistencia al acusar el maltrato, Gustavo Petro desistió ante su homólogo para apagar la incertidumbre económica y comercial, pues hasta 29 por ciento de sus exportaciones van a la potencia, entre café, plátano y flores, así como petróleo y derivados; escenario en el que cafetaleros reconocieron dudas, pues su producto ya registraba una importante alza en el precio , lo que lo llevaría a salir de ese mercado.
Previamente, el colombiano encaró al estadounidense: “Túmbeme y le responderán las Américas y la humanidad” al ratificar la defensa del “corazón del mundo”, como tierra de las “mariposas amarillas y los coroneles Aurelianos Buendía”, en alusión a la novela Cien Años de Soledad, de Gabriel García Márquez, e instar a consumir más producto local y no el de EU y llamar a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) a realizar una reunión para responder al republicano, tras reconocer que en ocasiones la región actúa “temerosa” ante quien los considera una “raza inferior”
Y el izquierdista sale debilitado luego de exhibir que los estadounidenses también son ilegales en Colombia, pues hay más de 15 mil en esta condición, por lo que les aconsejó regularizar su estancia, sin amenazar con redadas como las que han desatado miedo en Chicago, tras avalar perseguir a ilegales en iglesias, escuelas y hospitales, antes protegidos.
Además, Gustavo Petro enfrentó críticas en su país por provocar el “destierro” de connacionales; opositores lo encararon tras la afirmación del secretario de Estado de EU, Marco Rubio, de que inicialmente aceptó los vuelos y cuando ya se dirigían a la zona ordenó bloquearlos. Petro lo desmintió y dijo que no lo asustarían, pero el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, le restó autoridad al referir que no los representaba por arrastrar a la nación “a más pobreza y desempleo” por aranceles que no se concretaron.
Mientras que en el exterior lo arroparon. La presidenta de Honduras y líder de la Celac, Xiomara Castro, convocó a la reunión urgente para atender el tema, pero queda la duda de ahora qué se discutirá. En tanto, el venezolano, Nicolás Maduro, afirmó en Telegram “sabremos superar las dificultades”.
En contraste, hay naciones que tienden la mano a Trump. CBS News reveló que El Salvador firmará un acuerdo para ser “tercer país seguro”.
