Una adolescente afgana mató a dos talibanes y dejó a varios heridos para vengar la muerte de su madre y su padre, que acababan de ser asesinados a tiros en su casa por su apoyo al gobierno de Kabul.
Los hechos, de los cuales informaron las autoridades locales, se produjeron la semana pasada cuando una banda de 40 insurgentes irrumpió de madrugada en el pueblo de Geriveh, en la provincia de Gor, en el centro de Afganistán, donde la chica, llamada Qamar Gul, de 15 años de edad, según medios internacionales, vivía con sus padres y su hermano.
Gobierno afgano elogia valentía de Qamar
Los talibanes buscaban al padre de Qamar, que era el jefe del pueblo. Llamaron a la puerta y cuando la madre vió que estaban armados y se resistió, la mataron a tiros. Luego entraron a la casa y asesinaron al padre. Qamar, que lo presenció todo, tomó entonces la metralleta de su padre y abrió fuego contra los atacantes. Mató a dos y, junto a su hermano menor, de unos 12 años, comenzaron un enfrentamiento a tiros con los talibanes, el cual dejó a varios heridos.
Otros milicianos acudieron al pueblo para atacar la casa pero fueron repelidos a tiros por habitantes del pueblo y milicias progubernamentales.
La adolescente y su hermano fueron sido llevados por las fuerzas de seguridad afgana a un lugar seguro. El gobierno afgano elogió su valentía y el presidente, Ashraf Gani, les invitó a su palacio. Desde que los hechos salieron a la luz, las redes sociales hierven con comentarios sobre el acto “heroico” de la joven. Dos fotos de la adolescente, sosteniendo una metralleta, circula por internet.
Es habitual que los talibanes asesinen a aldeanos a los que acusan de colaborar con el gobierno o las fuerzas de seguridad.
ntb
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