El exlíder israelí Benjamin Netanyahu está más cerca de recuperar el poder en Israel a poco más de un año de que una gran coalición lo sacara del gobierno.
Los sondeos de salida anticipan que Likud, el partido de extrema derecha del ex primer ministro, alcanzaría la mayoría necesaria para tomar la batuta en la nación, pues según los pronósticos obtendría junto a aliados mínimo 61 de los 120 escaños, lo que le da la mayoría,.
Además, podría atraer a otras fuerzas y evitar que éstas se unan a la oposición.
Sin embargo, el exlíder no cantó victoria, pues aún no hay claridad sobre la conformación del parlamento mientras sigue el recuento de votos en las quintas elecciones en cuatro años, lo que supone un revés a la mayor alianza, liderada actualmente por Yair Lapid, que en menos de un año sufrió fracturas y no tuvo más remedio que convocar otras elecciones.
La repetición de comicios por la falta de continuidad de un gobierno y las fuertes críticas a Bibi, como es conocido Netanyahu, no apagaron el ánimo de los israelíes, pues de acuerdo con líderes las de ayer fueron las elecciones con mayor convocatoria, al superar 66 por ciento de participación, la más alta desde 1999, hecho que ya se había superado desde media jornada, cuando la autoridades electoral indicó que se rebasó la respuesta que hubo durante 2021.