Siete personas murieron, entre ellas un niño de 6 años, y 129 resultaron heridas por el impacto de un misil ruso en una céntrica plaza de la ciudad de Chernigov, en el norte de Ucrania, informó el sábado el Ministerio del Interior.
La gente se dirigía a la iglesia para celebrar una festividad religiosa cuando se produjo el impacto, dijo el ministerio, que añadió que 15 de los heridos eran niños y 15 eran policías.
"Un misil ruso impactó justo en el centro de la ciudad", publicó en Telegram el presidente Volodimir Zelenski, que se encontraba de visita en Suecia. "Un sábado normal, que Rusia convirtió en un día de dolor y pérdida".
Un breve video que acompañaba la publicación de Zelenski mostraba escombros esparcidos por una plaza frente a un teatro, donde los coches aparcados estaban muy dañados.
Chernigov es una ciudad de frondosos bulevares e iglesias centenarias situada a unos 145 km al norte de la capital, Kiev.
Las calles estaban manchadas de rastros de sangre y sembradas de restos de material de primeros auxilios que se había utilizado para tratar a los heridos.
Rusia ha atacado con misiles y aviones no tripulados ciudades ucranianas alejadas de la línea del frente como parte de la invasión que lanzó en febrero del año pasado.
La Fuerza Aérea de Kiev declaró a primera hora del sábado que el Ejército ucraniano había derribado 15 de los 17 drones Shahed de fabricación iraní lanzados por Moscú en un ataque nocturno.
Leo