Algunos defensores pugnan por la retirada

Bajmut, a tope, entre la división de bandos

El presidente Volodimir Zelenski sostiene que la fortaleza actual es suficiente para replegar a los invasores en Donbás; grupos de ambos países dudan sobre las estrategias emprendidas

Soldados ucranianos avanzan posiciones en un vehículo de combate en Bajmut.
Soldados ucranianos avanzan posiciones en un vehículo de combate en Bajmut. Foto: Reuters

La batalla por el control de Bajmut alcanzó su tope máximo tras intensos combates, lo que cobra facturas en ambos lados, pues ante la duda de cómo superarán esa crisis evidencian problemas internos.

Los defensores confirmaron a 376 días de la guerra y el incesante intercambio de disparos y bombardeos que este punto vive los peores días. Aunque presumen mayor fortaleza en comparación con el invasor, líderes y medios ucranianos vislumbran que la resistencia se debilita.

Pese a pronósticos desalentadores, las Fuerzas Armadas no desisten de forzar el retiro del ejército del Kremlin a la espera de refuerzos de hombres y equipo, pues no saben cuánto tiempo soportarán.

No obstante, el comandante en jefe de los locales, Valeri Zaluzhni, reconoció bajas probabilidades de retener esta posición. Enfatizó que los suyos infligieron pérdidas significativas al rival en Donbás, pero a últimas fechas están más enfocadas en repeler ataques que lanzarlos. Y antes de acumular más decesos, sugirió una retirada táctica, pues que sus soldados ya cuestionan por qué siguen ahí, ante los presagios de que Bajmut caerá a manos del régimen que los invadió, según datos de la agencia Ukrinform.

Gráfico
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Kiev sostiene que la balanza aún está de su lado y el presidente Volodimir Zelenski contradijo esa propuesta al recalcar que los suyos han mostrado más fortaleza y cuentan con respaldo para continuar con la operación defensiva, de acuerdo con una reunión con el Estado Mayor. Incluso, agradeció a éstos por seguir luchando en esta fase tan difícil.

Con ello confirma, como adelantaban medios, que la apuesta es desgastar a los soldados de Vladimir Putin, luego de que Inteligencia advirtiera que al rival le quedan armas y herramientas para tres meses más, por lo que prevén pasos significativos para Kiev al final de la primavera.

Además, se reportaron más roces en el campo. Militares ucranianos denunciaron un escaso apoyo, pues hay compañeros que fueron enviados a la primera línea de fuego sin suministros, lo que reduce drásticamente su probabilidad de sobrevivir, según testimonios difundidos por el diario The Kiev Independent.

Sin embargo, estas fisuras no afectan sólo al local, pues Rusia también enfrenta sus batallas con nuevos choques con el grupo Wagner, pues su líder, Yevgeni Prigozhin, acusó por segunda vez en un mes que el Kremlin parece restringirles las municiones.

El fundador de los mercenarios intensificó los reclamos contra la cúpula militar rusa al sostener que cada vez llegan menos suministros, por lo que advirtió que sin éstos en poco tiempo se desmoronará el frente en Bajmut, un fuerte mensaje a Moscú, pues el Ministerio de Defensa no cumplió su promesa.

Más tarde, el líder mercenario denunció otra traición de Putin al asegurar que a su representante en Moscú lo dejaron fuera del cuartel general, relegando a su grupo de la estrategia para tomar el control de Bajmut.