La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) y defensores de migrantes demandaron al gobierno de Joe Biden por la reciente norma que restringe el asilo si los cruces fronterizos superen un umbral de dos mil 500 al día.
“No nos quedó más remedio”, informó la organización al anunciar su desafío en respuesta al acto más severo del líder demócrata contra ciudadanos irregulares bajo el escenario electoral como primera prueba de su ilegalidad. Incluso, los demandantes ya asemejan tal medida con la administración de Donald Trump y que fue bloqueada por los tribunales.
Dicho sector externó su preocupación por violaciones que, dicen, no son sólo contra ese sector sino que perjudican al país, pese a que la potencia, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y su titular, Alejandro Mayorkas, justificaron el plan al alegar que darán exenciones si demuestren ser víctimas de trata, son menores no acompañados o tienen una emergencia grave.
La orden emitida por Biden la semana pasada pretende limitar el procesamiento de ayuda para evitar nuevos récords en la frontera con México.
Dicha limitación estará vigente dos semanas hasta que esta incidencia se reduzca a mil 500 en promedio durante siete días consecutivos, pero destaca que la última vez que se registraron cifras tan bajas fue en julio de 2020, en plena pandemia de Covid-19.
Al respecto, los defensores de los derechos de los migrantes acusan que suspender el asilo viola la ley federal de inmigración, más allá de supuestos asuntos de seguridad.