Luego de que Rusia bombardeara algunas ciudades ucranianas este lunes por la mañana, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se comprometió a "continuar brindando a Ucrania el apoyo necesario para defenderse, incluidos sistemas avanzados de defensa aérea".
Así lo informó la Casa Blanca luego de que el mandatario estadounidense sostuvo una llamada con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, durante la que aprovechó para condenar la nueva escalada rusa, uno de los ataques más severos contra Kiev desde el pasado 24 de febrero, cuando Vladimir Putin lanzó su "operación militar especial".
Vía telefónica, Biden insistió que Estados Unidos continúa trabajando con aliados para imponer sanciones a Rusia por sus "crímenes de guerra y atrocidades", pero también para brindar a Ucrania asistencia humanitaria, económica y de seguridad.
Previamente, a través de sus redes sociales, Biden señaló que los ataques con misiles de Rusia "demostraron una vez más la brutalidad de la guerra ilegal de Putin" y que no hacen más que reforzar su compromiso de apoyar al pueblo de Ucrania "durante el tiempo que sea necesario".
Por su parte, Zelenski aseguró a través de Twitter que fue una "conversación productiva" y que actualmente la defensa aérea es la mayor prioridad para Ucrania.
"También necesitamos el liderazgo de EU con la postura dura del G7 y con el apoyo a nuestra resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas"Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania
Esta mañana, Rusia hizo llover misiles sobre varias ciudades ucranianas, provocando la muerte de al menos a 14 personas y decenas de lesionados, además de destruir objetivos civiles, edificios, carreteras y dejar afectaciones al suministro eléctrico.
Al respecto, Vladimir Putin indicó que los ataques fueron en represalia por actos "terroristas" de Kiev, en referencia a los intentos de Ucrania de repeler la invasión de Moscú, incluido un "ataque" del sábado pasado, cuando se registró una violenta explosión en un puente que conecta a Rusia con la Península de Crimea, una arteria clave para el suministro de las fuerzas del Kremlin.
El ataque con decenas de misiles dañó casi 70 inmuebles, entre ellos el consulado alemán en la capital, Kiev, hecho denunciado por el gobierno alemán.
CEHR