El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, acordaron trabajar de forma conjunta con Reino Unido, Rumanía y otros socios internacionales para tomar acciones e investigar el supuesto ataque de Irán, perpetrado el pasado jueves, al buque comercial Mercer Street.
Lo anterior, luego de que la empresa Zodiac Maritime, encargada del petrolero ubicado frente a la costa de Omán, en el Mar Arábigo, informó que la agresión dejó dos tripulantes muertos de nacionalidad rumana y rusa.
Yair Lapid afirmó en redes sociales que desde el día de la acometida mantuvo conversaciones con sus colegas de “todo el mundo” y destacó que en específico EU y Reino Unido condenaron los actos que calificó como “terroristas”.
“El régimen asesino de Irán y los actos terroristas que exporta son una amenaza global. Me alegra que tanto Estados Unidos como el Reino Unido condenen estos actos”, aseveró.
“La amenaza del régimen terrorista en Irán sólo aumentará después del ascenso al poder del ‘verdugo de Teherán’ Raisi. El mundo entero necesita levantar un muro de manera política y de seguridad contra Irán. Israel continuará el diálogo con sus aliados en todo el mundo y trabajará juntos en las medidas necesarias contra el terrorismo iraní”, añadió en un hilo en su cuenta de Twitter.
Según medios locales iraníes, el ataque fue en respuesta a una agresión israelí en Siria, que acabó con la vida de dos hombres de la resistencia, hace poco más de ocho días.
Sin embargo, Irán negó ayer ser responsable de la embestida con un dron contra el Mercer Street y aseguró que “estas acusaciones son creadas por Israel para desviar la atención de los hechos que son infundados”.
“No es la primera vez que el régimen sionista que ocupa Jerusalén ha hecho acusaciones tan vacías contra la República Islámica de Irán. Dondequiera que este régimen haya ido, se ha llevado consigo inestabilidad, terror y violencia”, apuntó el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Saeed Khatibzadeh.
Pero no bastó que Irán rechazara las acusaciones, pues también el primer ministro israelí, Naftali Bennett, se lanzó contra Teherán de “intentar eludir la responsabilidad” y calificó su negación de “cobarde”.
“Irán es quien llevó a cabo el ataque contra el barco. El comportamiento agresivo de Irán es peligroso, no sólo para Israel, sino que daña los intereses globales en la libertad de navegación y el comercio internacional”, subrayó.
Por su parte, Antony Blinken dijo que Estados Unidos estaba “confiado” en que Irán es el responsable del ataque utilizando múltiples drones.
“Estas acciones amenazan la libertad de navegación a través de esta vía fluvial crucial, el transporte marítimo y el comercio internacional, y las vidas de los que viajan en los barcos involucrados”, agregó en un comunicado difundido por el portavoz del Departamento de Estado, Ned Prince.
Además, el secretario de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab, calificó el ataque como “ilegal e insensible”, y confirmó lo publicado por Yair Lapid, que Reino Unido y sus aliados ya planean una respuesta coordinada sobre la agresión con drones.
“Creemos que este ataque fue deliberado, dirigido y una clara violación del derecho internacional por parte de Irán”, sostuvo.
“Irán debe poner fin a esos ataques y se debe permitir que los barcos naveguen libremente de acuerdo con el derecho internacional”, puntualizó, coincidiendo en ese sentido con Blinken.
Las tensiones entre Israel e Irán han aumentado en la región del Golfo desde que Estados Unidos volvió a imponer sanciones a Irán en 2018, después de que el entonces presidente Donald Trump retirara a Washington del acuerdo nuclear de Teherán de 2015, con las principales potencias.