Un caza ruso SU-27 y un dron estadounidense colisionaron sobre en mar Negro, cerca de Crimea, cuando el primero de éstos intentó interceptar la supuesta aeronave enemiga.
De acuerdo con informes de la Casa Blanca una aeronave rusa derribó la unidad militar MQ9 luego de un sobrevuelo que calificó de “imprudente y poco profesional”.
En un comunicado, la Fuerza Aérea estadounidense detalló que el avión de combate voló intencionalmente frente al dron y después golpeó la hélice de éste, lo que provocó su caída al mar.
Ante esta situación, la nación de la aeronave afectada informó que ya inició una investigación para determinar responsabilidad sobre la caída del dron, fabricado por la firma General Atomics.
Este incidente aumenta la ya tensa relación entre los gobiernos de Joe Biden y Vladimir Putin principalmente por la guerra en Ucrania, pero Washington sentenció que este acto “temerario” no lo disuade de mantener labores de vigilancia en la región.
Incluso recordó que desde que el Kremlin invadió Kiev ha realizado varios sobrevuelos en la zona sin que esto representara una amenaza o riesgo para el régimen ruso y en la zona también operan drones de otra naciones, entre ellas alguna procedentes de Europa.
Sin embargo, hasta el momento no hay una respuesta rusa y la agencia TASS sólo reprodujo el informe de la Fuerza Aérea de EU.
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