Ciudades de Estados Unidos (EU) registraron aumento en las hospitalizaciones y muertes por COVID-19, ante la primera ola de la variante Ómicron.
La letalidad de los contagios es menor; sin embargo, la propagación es más rápida y provoca que las cifras aumenten en la capital de Washington y en las ciudades de Chicago y Nueva York, pues el repunte fue de un 150 por ciento en las hospitalizaciones.
Cabe recordar que la semana del 18 de diciembre, previa a Navidad, Ómicron ya era la variante con mayor presencia en el país.
Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), expusieron que aún no se puede dimensionar el impacto del repunte de contagios; no obstante, advierten cuál puede ser la dirección de la nación.
Nueva York, Chicago y Boston fueron los primeros en observar el repunte de casos positivos, situación que incrementará los números de meses anteriores.
Las personas acuden actualmente a los hospitales para ser diagnosticados con COVID-19, más que en el 2021, debido al nivel de infección que tiene Ómicron.
A pesar del panorama, los especialistas aseguraron que los nuevos infectados del virus SARS-CoV-2 tienen mejor recuperación que otros pacientes en años pasados; aunque el número de personas con necesidad de cuidados intensivos se acerque a un nuevo récord.
El incremento de casos provocó la escasez de personal, debido a la presión que sienten los especialistas en salud, además de que algunos también se infectaron, de acuerdo con The New York Times.
Cabe recordar que la CDC informó que el 12 por ciento de las personas en Estados Unidos, con 65 años de edad o más, no tienen el esquema completo de vacunación. Esta situación los expone a tener mayor vulnerabilidad ante COVID-19 de nivel grave.
MAEP
