Corea del Sur movilizó el viernes unos 80 aviones militares, entre ellos avanzados cazas F-35, después de haber detectado unos 180 vuelos de aviones de guerra norcoreanos dentro del territorio de Corea del Norte, en lo que parecía ser una demostración de fuerza.
El despliegue de aviones de guerra por parte de Corea del Norte se produjo después de que en los dos días anteriores lanzara una treintena de misiles balísticos en una airada respuesta a las maniobras conjuntas que realizan cientos de aviones militares de Estados Unidos y Corea del Sur.
Más tarde, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Norte calificó sus acciones militares de esta semana como una respuesta adecuada a los ejercicios conjuntos, los cuales describió como una muestra de la “demente confrontación militar” de EU, y afirmó que responderá con una “reacción superportente” a cualquier intento de las “fuerzas hostiles” de infringir su soberanía o su seguridad, por lo que llamó a a “detener de inmediato” los simulacros aéreos combinados denominados ‘Vigilant Storm’.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijo que los aviones de guerra norcoreanos fueron detectados en varias zonas del interior y a lo largo de las costas oriental y occidental del país, pero no se acercaron a la frontera de las Coreas. Los militares surcoreanos detectaron unas 180 estelas de vuelo entre la 11:00 y las 15:00 horas, pero no estaba claro cuántos aviones norcoreanos estaban implicados.
Ninguno de los aviones traspasó la línea virtual de “acción táctica” del ejército surcoreano, que se encuentra a entre 20 y 50 kilómetros al norte de las fronteras terrestres y marítimas de las Coreas y se utiliza con fines de vigilancia para dar a Corea del Sur tiempo suficiente para responder a provocaciones o ataques.
Unas 240 aeronaves que participan en los ejercicios combinados con EU “Vigilant storm” mantienen una “postura vigilante” mientras realizan las mencionadas maniobras.
