Autoridades de China detectaron un nuevo virus de origen animal que ya ha infectado a unas 35 personas, lo que eleva las alertas sanitarias, pues recuerdan que así comenzó a pandemia de COVID-19 en esa nación hace más de dos años.
Mientras aún siguen las investigaciones en torno a este virus, se reveló que es de tipo Henipavirus y ya es denominado como Langya, información que ya fue publicada en la revista científica The New England Journal of Medicine.
Según informes de diarios locales como el Global Times, los primeros casos ocurrieron en Henan y Shandong, que se ubican a poco más de 500 y 800 kilómetros de distancia de Wuhan, considerado el epicentro del coronavirus, y presuntamente todas las personas contagiadas han estado en contacto con animales.
Personal médico informó que el hallazgo ocurrió luego de realizar pruebas a personas que presentaron síntomas relacionadas al COVID, como fiebre, tos y dolo muscular; y a diferencias del coronavirus, que fue declarado emergencia sanitaria en marzo del 2020 este virus puede provocar irritabilidad, bajo recuento de plaquetas y hasta insuficiencia hepática o renal.
Sin embargo, no se adelantaron medidas preventivas al recordar que a diferencias de la lucha contra el COVID, por ser un nuevo virus, no existe un tratamiento o vacuna para prevenir su contagio. Cabe destacar que las vacunas contra el COVID-19 tardaron casi un año en comenzar a aplicarse luego de millones de contagios y muertes a nivel mundial.
También destaca que se trata de un virus que pasó a los humanos a través de animales, una de las teorías que se revisaron en tornaos coronavirus, lo que desató diferencias entre gobiernos como Estados Unidos y China, al exigir al gigante asiático permitir el ingreso al Instituto de Virología de Wuhan y al mercado de la zona, en el que se cree comenzó a circular el SARS-Cov-2.