En conferencia de prensa

“Es un día triste para el país”: Joe Biden tras fallo de la Corte Suprema que derogó el aborto

El mandatario calificó la decisión como un "error trágico"; pidió a la población salir a defender sus libertades de manera "pacífica" a través de las urnas

Joe Biden, presidente de Estados Unidos
Joe Biden, presidente de Estados Unidos Foto: Especial

Joe Biden, presidente de Estados Unidos, aseguró que es “día triste para la Corte y el país”, luego de darse a conocer la decisión del Tribunal Supremo de anular la protección del derecho al aborto vigente desde 1973.

"La salud y la vida de las mujeres de este país están ahora en peligro”, comentó. Además, calificó la decisión como un “error trágico” por parte del alto tribunal y aseguró que se produjo como consecuencia de unaideología extremista”.

El presidente llamó a la población estadounidense a seguir luchando de manera “pacífica” y a defender “en las urnasel derecho al aborto y todas las demás “libertades personales”, ya que se acercan las elecciones legislativas de mitad de mandato.

TE RECOMENDAMOS:
.

Mi administración defenderá ese derecho fundamental. Haré todo lo que esté a mi alcance para luchar contra ese ataque profundamente antiamericano”, afirmó. “Necesitamos más líderes estatales que protejan este derecho a nivel local (...) Tenemos que elegir a funcionarios que hagan eso”, señaló Biden.

Finalmente, el mandatario recalcó que la decisión lo ha dejado asombrado. "El tribunal ha hecho lo que nunca antes había hecho: quitar expresamente un derecho fundamental... Me deja atónito”. Pero estimó que esa decisión “no debe ser la última palabra”, y declaró: “El Congreso debe actuar... esto no ha terminado”.

“Déjenme que sea muy claro y no ambiguo. La única manera en que podemos asegurar el derecho de una mujer a elegir es que el Congreso restaure las protecciones de ‘Roe contra Wade’ como una ley federal. Ninguna acción ejecutiva del presidente puede hacer eso”, puntualizó Biden.

El juez Samuel Alito

El fallo se produjo más de un mes después de la sorprendente filtración de un borrador de opinión del juez Samuel Alito que indicaba que el tribunal estaba preparado para dar este paso trascendental.

El anuncio pone al máximo tribunal del país en desacuerdo con la mayoría de los estadounidenses, quienes apoyan preservar el caso Roe vs. Wade, según las encuestas de opinión.

Alito, en la opinión final difundida el viernes, escribió que los fallos Roe vs. Wade y Planned Parenthood vs. Casey —la decisión de 1992 que reafirmó el derecho al aborto— estaban equivocados el día en que se decidieron y debían ser anulados.

“Por lo tanto, sostenemos que la Constitución no confiere un derecho al aborto. Roe y Casey deben ser anulados, y la autoridad para regular el aborto debe ser devuelta al pueblo y a sus representantes elegidos”, escribió Alito.

La autoridad para regular el aborto corresponde a los poderes políticos, no a los tribunales, escribió Alito.

Se unieron a Alito los jueces Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett. Estos tres últimos jueces fueron designados por Trump. Thomas votó por primera vez para anular la Roe vs. Wade hace 30 años.

El presidente de la Corte, el conservador John Robert, indicó que él no habría puesto fin al derecho al aborto, diciendo que él habría ratificado la ley de Mississippi en el corazón de la causa para la revocación —una prohibición del aborto tras las 15 semanas de embarazo— y no dijo más.

Los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan —la reducida ala liberal de la corte— disintieron.

“Con dolor —por esta Corte, pero aún más por muchos millones de mujeres estadounidenses que han perdido hoy una protección constitucional fundamental— nosotros disentimos”, escribieron.

Se espera que el fallo afecte desproporcionadamente más a las mujeres de minorías, que ya enfrentan acceso limitado a la atención médica, de acuerdo con estadísticas analizadas por The Associated Press.

La única clínica de abortos en Mississippi continuaba recibiendo pacientes el viernes. Afuera, hombres con megáfonos les gritaban a las personas adentro de la clínica que arderían en el infierno.

Personal de escolta de la clínica con chalecos de colores usaron altavoces para responder con la canción de Tom Petty “I won’t back down” (No me echaré atrás).

Temas: