La presidencia siria anunció que la primera dama y esposo del dictador Bashar al Ásad, Asma al Ásad, fue diagnosticada con leucemia mieloide aguda y suspenderá temporalmente su agenda para recibir tratamiento.
El comunicado presidencial detalló que la mujer de 48 años se adherirá a un protocolo de tratamiento especializado que incluirá medidas estrictas de prevención de infecciones y distancia social, obligándola a abandonar todos sus compromisos oficiales; sin embargo, señalan que se mantiene decidida y comprometida, confiando en su voluntad fuerte y fe en Dios.
Este nuevo desafío para la primera dama llega años después de haber superado un cáncer de mama, pues en 2019, celebró su recuperación completa de esta enfermedad detectada en 2018, ésta en una etapa inicial gracias a los chequeos médicos regulares. Y es que ella como activista ha promovido constantemente la detección temprana de este tipo de cáncer entre las mujeres.
Asma al Asad nació en Reino Unido y se trasladó a Damasco a finales de los dos mil para casarse con el líder sirio, Bashar al Ásad.
Desde el inicio del conflicto en Siria en 2011, hubo rumores sobre su posible salida del país por motivos de seguridad y su presunta oposición al conflicto; sin embargo, permaneció al lado de su marido, apoyándolo en numerosos actos públicos a lo largo de esa guerra.
Con el diagnóstico de leucemia, que se realizó tras la aparición de varios síntomas y signos clínicos, según el régimen sirio, Asma enfrenta un duro capítulo en su vida, mientras Siria aún lidia con las secuelas de años de conflicto.
Y destacan que la fortaleza y el compromiso de la primera dama serán cruciales en los próximos meses para luchar contra esta enfermedad.
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