Poco después de que el expresidente estadounidense, Donald Trump, se entregara en la prisión de Fulton, en Georgia, se difundió por primera vez la fotografía del magnate fichado.
Pese a que acumula cuatro imputaciones ésta es la primera vez que se haría pública la imagen del republicano procesado, a quien se le ve vestido de traje y con corbata roja, contrario a una imagen falsa que circuló con una corbata a rayas.
A dicho proceso ya se enfrentaron antes que él 11 coconspiradores, quienes se rindieron ante las autoridades por su presunta participación en una conspiración para revertir las elecciones, antes del plazo fijado por la fiscal, Fani Willis.
El mandatario estuvo poco menos de media hora en la cárcel local para el procesamiento que incluyó la toma de huellas y la garantía de 200 mil dólares que sus abogados acordaron ante los 13 cargos que enfrenta por orquestar una “empresa criminal”.
Y al ser liberado salió de la zona bajo un fuerte operativo de seguridad que constó de una caravana de más de 10 vehículos para retornar al aeropuerto en Georgia, donde acusó nuevamente que ésta acto es una evidente “interferencia electoral”.
En una breve declaración antes de abordar su avión de regreso a Nueva Jersey insistió que ni él ni sus aliados hicieron nada malo, pues ante la sospecha de que hubo un fraude tenían el derecho de retar las elecciones de 2020.
Cabe destacar que, pese a sus intentos por retrasar el juicio, la fiscal Willis solicitó arrancar el juicio el próximo 23 de octubre y no hasta marzo, luego de que uno de los coacusados pidiera un proceso rápido, lo que va en contra de los planes.
