Se anticipa el retorno de Carles Puigdemont

En España dan luz verde a la ley de amnistía

Legisladores respaldaron la iniciativa del presidente Pedro Sánchez con 178 votos a favor y 172 en contra

El presidente Pedro Sánchez (abajo) y legisladores aplauden tras la votación, ayer.
El presidente Pedro Sánchez (abajo) y legisladores aplauden tras la votación, ayer.Foto: AP
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Pese a la oposición del Partido Popular (PP), la ley de amnistía fue respaldada por el Congreso de España, con lo que se anticipa el retorno del líder independentista Carles Puigdemont.

Con ajustes para incluir algunos tipos de terrorismo para el perdón de cientos de secesionistas acusados de traición y malversación, legisladores respaldaron la iniciativa del presidente Pedro Sánchez con 178 votos a favor y 172 en contra.

Acto que el líder socialista resaltó abre la puerta al “reencuentro nacional”, especialmente entre España y Cataluña, para dejar las disputas que arrastran desde 2017. Lo que recuerda los recientes choques por el Gobierno y duros meses de protestas en las que sus críticos recriminaron el apoyo del PSOE a independentistas sólo para amarrar su segundo mandato consecutivo con el voto de los separatistas de Junts y Esquerra Republicana (ERC), al recordar que un tribunal lo declaró inconstitucional.

Pero la derecha amagó con frenar la medida en el Senado, donde tiene la mayoría absoluta, pues reivindicó que tal aval es una clara violación al Estado de derecho en un duro mensaje al Palacio de la Moncloa.

Pero el camino para revertirla no es fácil, pues se prevé que ante cualquier ajuste vuelva a diputados en donde sólo se requeriría una mayoría simple para promulgarla, hecho que se vislumbra por el sufragio de ayer.

Y medios adelantan que el grupo conservador de Alberto Núñez Feijóo sólo logre retrasarla, pero entre mayo y junio de este año sería publicada, sepultando las penas contra los secesionistas.

Por ello, se cree que este mismo año Puigdemont y otros líderes salgan del exilio desde Bélgica e intenten retomar el liderazgo catalán, justo cuando la Generalitat adelantó casi un año sus elecciones, proceso para el que aún no han definido a sus candidatos. Plan que Sánchez dejó entrever que no apoyaría abiertamente al poner en pausa el presupuesto anual.