El Gobierno de Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA) recriminaron la destitución de magistrados y fiscal general en El Salvador por parte de la Asamblea Legislativa, liderada por el partido del presidente Nayim Bukele.
El secretario de Estado de EU, Antony Blinken, criticó la remoción de los funcionarios al destacar los esfuerzos conjunto para combatir al crimen organizado, reveló el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, entorno a la separación de los integrantes de la Sala de lo Constitucional del Supremo y al fiscal Raúl Melara.
Mientras que el funcionario del gabinete de Joe Biden asevero a través de su cuenta de Twitter que conversó vía telefónica con Bukele a quien le externó su inquietud por la decisión del Poder Legislativo y afirmó que “la gobernabilidad democrática requiere respetar la separación de poderes”.
OEA levanta la voz
En tanto, la Secretaría general de la OEA aseveró que dichas acciones, de las que responsabilizó a Bukele por “guiar” a legisladores, son un golpe a la democracia, el Estado de Derecho, los principios y derechos humanos.
En un comunicado señaló que en vez de ser garantes de los derechos humanos han dado un golpe a la separación e independencia de los poderes, luego de que el Legislativo asumiera el control tras remover a los funcionarios.
Las mayorías tienen la responsabilidad de ser garantes fundamentales para asegurar el respeto a los derechos humanos (…) Cuando las mayorías imponen una visión única y uniformizada para el resto del sistema político están socavando estos principiossostuvo.
Y recordó que ante las investigaciones en curso contra casos de corrupción es necesario dar continuidad a los trabajos de la Misión Especial, que encabeza Santiago Cantón, quien advirtió desde este sábado que Bukele sigue “deteriorando la frágil democracia”.
