Estados Unidos agiliza a marchas forzadas los retornos de migrantes a México para evitar un desborde ante el fin de la aplicación del Título 42, que permite expulsarlos por medidas sanitarias por el Covid-19 y el presidente Joe Biden admitió que espera una situación “caótica” en días.
El objetivo, según medios locales, es reducir la presencia de extranjeros ante una temida oleada masiva a partir del 12 de mayo, así sólo permanecerán en su territorio los procesados y quienes esperan respuesta al trámite en busca de asilo.
Ni el severo reforzamiento y despliegues masivos, como en Texas, disuaden al sector y miles abarrotan desde hace días la frontera del lado de México, principalmente en el río Bravo, con la creencia de que ingresarán sin trabas en cuanto desaparezca la política de la era de Donald Trump.
Incluso, 72 horas antes de este cambio, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) envió equipos especiales a El Paso para detener a infractores ante la llamada “amenaza” a la seguridad nacional, con miras a acelerar el procesamiento de los extranjeros irregulares para su posible expulsión, con lo que Washington deja en claro que la frontera no está ni estará abierta, según lo expresado por el gobierno y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Pero ante la incertidumbre, quienes ya están del otro lado y hasta ayer dormían en las calles ahora abarrotan albergues y otros espacios para garantizar su permanencia en EU. Saben que si no comprueban su estatus serán los primeros enviados a las oficinas del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para ser deportados, hecho que corroboró el comisionado interino del CBP, Troy Miller.
Incluso ese miedo forzó a cientos de irregulares, en su mayoría venezolanos, a entregarse voluntariamente para evitar que los expulsen. Éstos optaron por hacer fila afuera de un centro de procesamiento para cumplir con los requisitos de EU y tener acceso a ayuda legal o un posible refugio.
“Te conviene entregarte” fue el mensaje que leyeron en folletos emitidos por la Patrulla Fronteriza para advertirles sobre su condición ilegal, hecho ante el que varios se resignaron, pues temen que una redada trunque el “sueño americano”. Sin embargo, no hay garantías de que se queden, pues saben que aún podrían aplicarles el Título 42 y regresar a México o su país de origen.
Al respecto, el comisionado Miller exhortó a los migrantes a no caer en los engaños de contrabandistas y traficantes, pues violar la ley los llevaría a una inmediata expulsión y hasta negarles la entrada a futuro, como indica el Título 8, pues serían calificados como un riesgo a la seguridad pública y nacional.
Cabe destacar que un día antes el CBP reportó que su personal activaría una “operación específica” para atender el enorme desafío contra los viajeros indocumentados que buscan quedarse en el territorio, hecho por el que el presidente admitió ante la prensa que esperan momentos difíciles.
Ante la presión de reporteros sobre lo que se espera esta semana sólo respondió que la situación en esa zona será “caótica por un tiempo”, lo que provocó críticas al recordar que eso se ha extendido desde que asumió el gobierno.
A este nivel de seguridad se suma el traslado de mil 500 militares para labores administrativas y de monitoreo por hasta 90 días, procedentes de California y Carolina del Norte de acuerdo con informes de The Associated Press, y la presencia de fuerzas tácticas, para revertir lo que el gobernador Greg Abbott denominó “caos fronterizo”.
Y es que diferentes niveles de gobierno buscan contener a estos grupos a través de la Guardia Nacional, que resguarda la frontera desde finales del año pasado.
Funcionarios de EU revelaron a medios que en el corto plazo prevén aumentar las salidas y otras estrategias al ubicar zonas críticas, debido a los cruces ilegales que alcanzarán los 10 mil al día y la concentración de indocumentados.
En tanto, el gobierno federal recalcó que expulsarán y deportarán a quienes no comprueben que ya fueron procesados. Y es que éste recordó que no le cerrarán la puerta a todos; por ello, EU abrió hasta mil entrevistas diarias para evaluar si cumplen con los requisitos.
Éstas se programarán a través de la aplicación CBP One, así como en varios puertos fronterizos y se priorizarán los casos de quienes llevan más tiempo esperando respuesta.
Al respecto, críticos de Biden acusaron que tal proceso sólo busca liberar a los migrantes en EU. Tal es el caso de la cadena Fox News que advirtió que como los albergues ya no tienen la capacidad de recibir a migrantes el gobierno los liberará en masa, hecho ante el que una fuente en la Patrulla Fronteriza admitió que “la presa está a punto de romperse”. Situación que sólo aumenta las tensiones, pues insisten que el presidente no trata de frenar los flujos migratorios.
México y EU reafirman labor en crisis migratoria
El Presidente Andrés Manuel López Obrador y su homólogo estadounidense, Joe Biden, ratificaron su decisión de estrechar la cooperación bilateral para abordar el desafío de la creciente migración.
Para acordar los términos de la colaboración, ayer por la mañana sostuvieron una conversación a distancia en torno a este fenómeno y acerca del tráfico ilegal de drogas y armas, y también sobre la cooperación para el desarrollo.
López Obrador destacó que Biden se mostró receptivo a cooperar para mejorar el bienestar de los pueblos más pobres del continente.
“Conversamos alrededor de una hora con el presidente Biden. Reafirmamos el compromiso de seguir trabajando juntos en temas como la migración con dimensión humanista, el tráfico de drogas y armas y, sobre todo, en cooperación para el bienestar de los pueblos más pobres de nuestro continente. Somos buenos vecinos y amigos”, escribió en su cuenta de Twitter.
La conversación se llevó a cabo dos días antes de que concluya en Estados Unidos el protocolo Título 42, que impone restricciones a la migración en el marco de la pandemia de Covid-19.
En un comunicado, la Casa Blanca refirió que ambos líderes hablaron acerca de fortalecer la relación bilateral, “incluida la importancia de mejorar la cooperación entre Estados Unidos y México para manejar la migración sin precedentes en la región.
Con ese fin, discutieron una estrecha coordinación continua entre las autoridades fronterizas y fuertes medidas de cumplimiento, en preparación para el regreso a la plena confianza en las autoridades de inmigración del Título 8 en la frontera”.
López Obrador y Joe Biden subrayaron la importancia de contar con una migración ordenada con vías legales ampliadas y consecuencias para la migración irregular, establece la comunicación de la Casa Blanca.
Entre los compromisos asumidos, se encuentra el abordar las causas de la migración desde Centroamérica y ampliar los esfuerzos conjuntos de nuestras dos naciones para resolverlas.
Abordaron la urgencia de reducir el hacinamiento en el norte de México y ambos presidentes afirmaron que, después del 11 de mayo, cuando quede sin efecto el Título 42, se activará:
“La exitosa iniciativa conjunta que, en cuatro meses, logró una caída del 95 por ciento en los encuentros fronterizos de personas de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela en la frontera entre Estados Unidos y México”.
Por su parte, el presidente Biden se comprometió a mejorar los controles para evitar que siga el flujo ilegal de armas a México.
Y se refirió a “los esfuerzos mejorados y acelerados para contrarrestar el tráfico ilícito de fentanilo y armas mediante el desmantelamiento de las redes criminales”.
En el encuentro también estuvo presente el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, quien se retiró de Palacio Nacional sin ofrecer detalles del encuentro por videoconferencia entre ambos presidentes.
Preocupa a ONG retorno de los indocumentados
Más de 50 organizaciones de la sociedad civil, encabezadas por el Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi), ven con preocupación que el Gobierno seguirá aceptando migrantes al término del Título 42, pero ahora bajo el protocolo del Título 8; sin embargo, al momento no hay información de cómo se va a realizar.
En una carta enviada al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y al de Gobernación, Adán Augusto López, cuestionan las nacionalidades que estará aceptando México y si se ha determinado un límite en el número de personas.
Además, cuáles serán los documentos migratorios que proporcionará el gobierno mexicano para la población retornada de Estados Unidos y los criterios para facilitar el retorno seguro a los países de origen, entre otras.
Señaló que es imprescindible aclarar estas dudas y crear un diálogo abierto, transparente y urgente con el gobierno mexicano, con el objetivo de brindar una atención y acompañamiento a personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas en ambos lados de la frontera.
Otras dudas de las organizaciones son las medidas que van a adoptar en sus oficinas para garantizar la seguridad de las personas retornadas, tipo de acuerdo conjunto o colaboración con Estados Unidos para atender a las necesidades de las poblaciones retornadas, apoyo a las instituciones que darán atención como la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) o la instalación de albergues temporales en las ciudades fronterizas.
Así como acciones o medidas basadas en el interés superior de la niñez, proteger a niñas, niños y adolescentes de los resultados de las políticas migratorias post Título 42 y las medidas para garantizar la no separación familiar.
“En varias ocasiones hemos resaltado la urgente necesidad de que el gobierno estadounidense restaure el acceso al asilo en la frontera a todas las personas que desean solicitar protección en ese país, y que el gobierno mexicano garantice los derechos humanos y seguridad de las personas retornadas al país a consecuencia de políticas estadounidenses”, destacó en la misiva.
Las organizaciones esperan que las autoridades puedan transparentar los informes acerca de los programas que benefician o afectan a los migrantes.
En Cd. Juárez piden dejar alrededores de Palacio Municipal
La alcaldía de Ciudad Juárez, Chihuahua, instó a los migrantes que acampan afuera de la Presidencia Municipal, para que desalojen el área y acudan a los albergues que han dispuestos para ellos.
El alcalde Cruz Pérez Cuéllar indicó que lo anterior se realiza con el objetivo de proteger a las personas, debido a que ya hay problemas de salud, sobre todo entre menores y mujeres.
“Hay comunicación permanente de la dirección de Derechos Humanos con los migrantes y no tiene sentido que sigan ahí, muchos de ellos tiene problemas de salud y estamos en ese proceso y lo queremos hacer de manera pacífica”, comentó.
Precisó que los migrantes deben estar conscientes de las acciones que busca emprender el gobernador Greg Abbott en su contra, ya que en breve desplegará y reforzará la presencia de agentes en la frontera para detener y deportar a todo aquél que intente ingresar a Estados Unidos de manera irregular.
Asimismo, mencionó que existen albergues que aún tienen capacidad de aceptar a decenas de personas, con el fin de que no se concentren en la frontera.
A pesar de ello, en las últimas horas se ha visto un aumento en la gente que llega al límite entre ambos países, ya que muchos esperan este jueves, día en que termina la política expulsora Título 42 para entregarse a la Patrulla Fronteriza y tener una oportunidad para solicitar asilo.
La mañana de este martes comenzaron a aparecer boletas que invitan a los migrantes a entregarse a las autoridades; sin embargo, reportes locales aseguran que no saben quién los entregó, pero muchas de las personas temen que sea una estrategia para detenerlos y deportarlos a la frontera sur.
A pesar de ello, cientos de migrantes se siguen acercando a las zonas fronterizas y al paso de los días, comienzan a arribar más desde el sur del país, por lo que se espera que este jueves se llenen todos los pasos para comenzar los cruces.
El gobernador de Texas, Gregg Abbott, prepara el operativo “Fuerza Fronteriza Táctica”, la que prevé desplegar 10 mil elementos de la Guardia Nacional de ese estado, con el uso de helicópteros del tipo Black Hawk y C 130, todo esto con motivo de la eliminación del Título 42 este miércoles a las 23:59 horas.
