Con miras a reforzar la protección contra el coronavirus, el regulador médico de Estados Unidos dio luz verde a la aplicación de una cuarta dosis antiCovid entre los mayores de 50 años de edad.
A unos meses de autorizar el llamado segundo refuerzo para pacientes inmunocomprometidos de más de 12 años, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) respaldó ampliar el número de biológicos entre la población adulta mayor, pues se ha detectado una disminución de la inmunidad, lo que representa un alto riesgo con Ómicron, exponencialmente más contagiosa que las variantes previas.
Con ello, ofrecerán los fármacos de Pfizer o Moderna a quienes completaron el esquema de tres inyecciones al menos cuatro meses antes y ratificó, como en el visto bueno de las vacunas previas, que los beneficios son mayores a los riesgos, pese a la resistencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para garantizar el acceso de fármacos para naciones con bajos niveles de protección.
Los especialistas, que revisaron ensayos clínicos de Israel, detallaron que con ello se reforzará la inmunidad ante casos de enfermedad grave u hospitalización, lo que evidencia la incertidumbre tras dos años de luchar contra la pandemia, pues, aunque en el país ha bajado la cifra de positivos en el año, no descartan que surjan nuevos brotes a causa de Ómicron, actualmente dominante, y su subvariante BA.2, como ya ocurre en regiones como Shanghái, en China, y en Gran Bretaña.
En torno al rango de edad aprobado, el doctor e integrante del regulador estadounidense, Peter Marks, señaló que son las personas con mayor riesgo por la prevalencia de comorbilidades que han demostrado pueden agravar su condición.
Y precisó “si fueran mis pacientes, los enviaría a esto (recibir una dosis adicional)”. Cabe destacar que según datos previos los adultos mayores que contaban con el esquema completo actual tienen menos probabilidades de fallecer o ser intubados debido a la gravedad por esta enfermedad.
Sin embargo, aún no hay una fecha clara, pues se espera que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) definan cuándo comenzará esta estrategia.
En tanto, el país se mantiene a la cabeza de fallecimientos y contagios a nivel mundial con 978 mil 645 y 80 millones 19 mil 002, respectivamente, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins y se ubica con 65 por ciento de población con doble esquema Covid, según el último reporte de Our World in Data.
Y es que algunos expertos han considerado que no es necesario este nuevo biológico, pues las variantes dominantes, aunque son más contagiosas, han demostrado ser más leves.
No obstante, reconocen que persiste la incertidumbre en torno a la inmunidad y su duración, por lo que desde hace meses algunos especialistas contemplan la posibilidad de que las inyecciones sean anuales, como ocurre en la actualidad contra la influenza.
En tanto, la FDA reconoce que ya analiza ampliar gradualmente el uso de esta cuarta dosis o segunda vacuna de refuerzo para combatir a las variantes actuales y nuevas, tema que ya se discutía desde el año pasado empujado por las farmacéuticas que consideran necesario reforzar la protección.
Asimismo, evalúan una quinta dosis para todas las personas con sistemas inmunes comprometidos por algunas enfermedades graves, y, aunque no adelantan fechas, pronostican que la decisión llegaría para el otoño, periodo en el que la OMS calcula que todos los países alcancen el objetivo de hasta 40 por ciento de la población inmunizada con al menos una dosis, pese a no alcanzar el 10 por ciento en los plazos previstos, debido al acaparamiento de dosis.