Estados Unidos consiguió la liberación de cinco connacionales retenidos por el régimen iraní en un intercambio de prisioneros que incluyó la entrega de seis mil millones de dólares congelados desde 2019.
Luego de una negociación “de riesgo”, según fuentes de la gestión de Joe Biden, ambas naciones confirmaron el canje de igual número de presos, lo que medios ven como una señal para extender las conversaciones en otros asuntos, pese al distanciamiento de décadas y el jaloneo de casi un año, en el que hubo demandas que la Casa Blanca rechazó.
Sin embargo, no existen garantías ante choques como el programa nuclear de Teherán, tema frenado desde 2022 y del que el secretario de Estado, Antony Blinken, admitió es la mayor preocupación para EU. Pero destaca que los mandatarios Joe Biden y Ebrahim Raisi podrían reunirse en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que arrancó ayer en Nueva York.
Enviados de Washington en Qatar —mediador del histórico proceso— resaltaron que cinco ciudadanos de EU fueron rescatados de condenas de hasta 10 años en prisión por supuesto espionaje, lo que recuerda a un canje similar con Rusia, en el que el equipo de Biden retornó a casa a la basquetbolista Brittney Griner.
La prensa occidental detalló que en el llamado acuerdo de reciprocidad, la administración demócrata garantizó el acceso de Teherán a un fondo petrolero de una deuda en poder de Corea del Sur, transferida por Suiza, y la entrega de cinco prisioneros acusados de exportar dispositivos electrónicos ilegalmente, que serían usados por las Fuerzas Armadas islámicas. Pero a diferencia de los estadounidenses éstos no regresarán a Irán, sino que permanecerán en EU.
Tras las intensas conversaciones diplomáticas, el régimen corroboró el intercambio de quienes ya estaban bajo arresto domiciliario, como signo de confianza para EU, mientras fuentes de ese régimen revelaron que se trató de un indulto.
Y éste externó que esperaba acceso inmediato a los fondos para atender sus necesidades. Horas después el director del Banco Central iraní, Mohammad Reza Farzin, reveló a la televisión estatal que ya tenían los seis mil millones de dólares, luego de presionar para recuperar las ganancias por la venta de crudo desde la era de Donald Trump, cuando se impusieron nuevas restricciones, y mientras la región islámica vive una crisis económica, a un año de que estallaran las protestas por el crimen de la joven Mahsa Amini.
Por separado, el ministro de Exteriores en Teherán, Nasser Kanaani, reconoció que el monto fue clave en el acuerdo para retomar sus activos. Sin embargo, medios locales adelantaron que éste será limitado, ya que sólo podría usarse en ayuda humanitaria.
Con lo que se presume que Washington condicionó su destino para alimentos, medicinas y productos agrícolas, evidenciando que aún no superan las tensiones, pues su relación luce endeble para dar pasos significativos en otros temas, como el intento de EU de enviar vigilancia al Estrecho de Ormuz para seguir los envíos petroleros, donde se concentra 20 por ciento del total mundial.
Tras la salida del avión de Teherán, el presidente Joe Biden aplaudió que “Cinco inocentes que fueron encarcelados en Irán finalmente están regresando a casa”, de acuerdo con un comunicado.
Al respecto, agencias asiáticas informaron que un vuelo de Qatar Airlines despegó del Aeropuerto Internacional Mehrabab, en la capital iraní, hizo escala en el territorio intermediario, donde se tomaron las primeras fotos de quienes admitieron, según diplomáticos, soñaban con ese momento desde que fueron detenidos en territorio extranjero.
Posteriormente otro avión partió rumbo a EU para que los empresarios y una excolaboradora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se reencuentren con sus familias.
No obstante, la Casa Blanca evitó identificarlos, pues sólo expuso tres nombres: Siamak Namazi, detenido en 2015; Emad Shargi y Morad Tahbaz, quien llevaba ocho años bajo custodia; por lo que dos quedaron en incógnita. Pero autoridades agregaron que éstos viajaban en compañía de dos familiares, quienes resaltaron que después de recibir cargos falsos hoy por fin están libres.
Además, el panorama de un posible acercamiento luce desalentador, pues además de la tensión sobre los planes nucleares de Teherán, que suministró drones a Rusia en la guerra contra Ucrania, la gestión de Biden impuso nuevas sanciones contra aliados de Raisi, como el expresidente Mahmoud Ahmadinejad y al Ministerio de Inteligencia iraní.
Pero el ministro de Exteriores del régimen, Mohammed bin Abdulrahman al-Thani, no quita el dedo del renglón, al reconocer públicamente que éste es un paso importante en torno a un diálogo más amplio, ligado a los temas nucleares, de acuerdo con una publicación del diario The Washington Post.