Ataque a Ucrania

Grupo Wagner despide a su líder en total secreto

En total secrecía los fieles mercenarios implementaron un operativo para enterrar en privado a quien falleció en un sospechoso accidente aéreo en Tver

Un policía toma una foto a la rumba de Prigozhin, ayer, en un cementerio de San Peterburgo.
Un policía toma una foto a la rumba de Prigozhin, ayer, en un cementerio de San Peterburgo. Foto: AP

Con medidas extremas que incluyeron distractores para el Kremlin y la prensa, el Grupo Wagner dio el último adiós a su líder Yevgeni Prigozhin a una semana de su polémica muerte.

En total secrecía los fieles mercenarios implementaron un operativo para enterrar en privado a quien falleció en un sospechoso accidente aéreo en Tver en una ceremonia íntima de poco más de media hora a la que sólo asistieron sus familiares, amigos y aliados del comandante, de acuerdo con la agencia Interfax.

Sin adelantar cuál sería de última morada, la agrupación paramilitar confirmó ahora descansa en San Petersburgo junto a los restos de su padre en el cementerio de Serafimovski, el mismo lugar donde reposan los restos de los padres del presidente ruso, Vladimir Putin, en la misma ciudad que tenía como destino el pasado 23 de agosto cuando su aeronave colapsó y cayó a tierra sin dejar sobrevivientes, quienes también fueron enterrados en el mismo punto, según medios locales.

Y adelantaron que quienes le han rendido sentidos homenajes afuera de su restaurante y en otros espacios públicos podrán darle el último adiós en breve, al acudir a su tumba, lo que movilizó de inmediato a medios de comunicación para captar las primeras fotografías de su lápida, en un punto fuertemente resguardado por aliados ante el temor de que detractores intenten vandalizarla por sus diferencias con el Kremlin.

Asimismo, se detalló que al tratarse de un evento a puerta cerrada no asistieron líderes de la nación, al rechazar la presencia de Putin, a quien ven como el responsable de su muerte.

Sin embargo, el propio régimen descartó la asistencia de su antiguo amigo, pues el vocero ruso, Dmitri Peskov, dijo que su asistencia “no está prevista”, en franco desdén contra el hombre que provocó el mayor golpe contra su gestión con la revuelta de junio pasado.