Ligan a 190 aliados de organismo con islámicos

Hamas complica tregua y crece rechazo a ONU

Grupo terrorista aumenta la presión a Israel e insiste en cese el fuego para liberar a rehenes; piden auditar a la agencia de refugiados y crece la lista de países que le quitan ayuda

Personal de la UNRWA mantiene operaciones en la región de Yenín, en Gaza, ayer.
Personal de la UNRWA mantiene operaciones en la región de Yenín, en Gaza, ayer. Foto: Reuters

El grupo terrorista Hamas rechazó un nuevo planteamiento de tregua, pues sigue firme en que sólo habrá acuerdo si Israel acepta un cese el fuego permanente y el retiro de tropas de Gaza.

La resistencia islámica apagó el ánimo de mediadores que admitían “convincentes” avances, pues advirtió junto al Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) que se necesita un pacto más amplio, según un mensaje replicado por los diarios Times of Israel y Jerusalem Post.

Así sube la presión para el Gobierno de Benjamin Netanyahu si quiere de vuelta a 136 rehenes, luego de que el primer ministro se negara a ceder ante quienes masacraron a su país; sin embargo, aliados de Tel Aviv luchan por romper con ese estancamiento.

Ante la indecisión sobre una pausa de dos meses, París planteó reducir el proceso a seis semanas en una primera fase. En ésta, según fuentes de Francia, Estados Unidos y Qatar, el rival entregaría a 40 víctimas, entre mujeres y adultos de más de 60 años en condición crítica, y al concretarla se fijarían las bases para futuras etapas sin adelantar cuántos prisioneros intercambiarían como el año pasado.

En tanto, la tensión no cesa en Medio Oriente, pues ni el anuncio del despido de nueve empleados de la Agencia para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés) por su implicación en la masacre del 7 de octubre pone fin a las críticas, pues Israel le cerró las puertas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aliados pidieron una auditoría al sector y se destapó que hasta 190 trabajadores están ligados a Hamas.

Según un informe difundido por Reuters y Wall Street Journal, la cifra corresponde a militantes o seguidores yihadistas, quienes habrían secuestrado a mujeres y trasladado cuerpos de soldados israelíes a Gaza.

En respuesta a dichas revelaciones el ministro de Exteriores de la nación en guerra, Israel Katz, suspendió un encuentro programado con la agencia para mañana y sentenció que no basta con rescindir contratos a los cómplices al exigir la renuncia del comisionado, Philippe Lazzarini, mientras que horas después la agencia del área de violencia sexual en conflictos garantizó justicia y convocó a las víctimas a una reunión.

Pero el lazo de la resistencia islámica y la ONU no termina ahí, Times of Israel abundó, basado en el mismo documento, que 10 por ciento de los miles de empleados de esa agencia está relacionado con islámicos y 50 por ciento tiene familiares con nexos cuestionables, lo que evidencia una creciente ideología radical contra Israel que puede agravar el conflicto.

Por separado, la Unión Europea (UE), principal donante de la UNRWA, urgió una revisión independiente para descartar posibles implicaciones a futuro con el enemigo y más naciones se sumaron a la suspensión de apoyo económico como Austria, Japón y Nueva Zelanda, pero España da muestras de confianza.