Aunque pareciera que la histórica ola de calor que quema a Europa ha resultado algo inusitado o increíble, no es del todo cierto. Desde hace décadas, científicos han hablado sobre el cambio climático, advirtiendo de severas consecuencias para el medio ambiente. Y es que las “poco frecuentes” temperaturas elevadas no es síntoma de un sólo continente, pues desgraciadamente se está repitiendo en todo el globo terráqueo. Lo más lamentable es que el intenso calor de esta temporada no será el último. De acuerdo con la Universidad de Bristol, las altas temperaturas serán cada vez más frecuentes e intensas. Y es que hay que recordar que además del extremo calor, las consecuencias del cambio climático incluyen escasez de agua, sequías, incendios forestales, inundaciones, el deshielo de los polos, tormentas con destrucción y una clara afectación a la biodiversidad. La actuación de manera inmediata evitará que se ponga en riesgo la vida de millones de personas en un futuro que amenaza con no estar tan lejano.
Gráficos: Ismael F. Mira, Roberto Alvarado y Luisa Ortega.