El crimen ocurrió en septiembre de 2020 en China, cuando el sujeto roció un balde de gasolina sobre Lhamo, la mujer tibetana de 30 años, mientras ella estaba transmitiendo un video en vivo.
La influencern murió 16 días después de que su expareja, identificado como Tang Lu, la prendiera en llamas ante el horror de usuarios de redes sociales en China.
La joven tenía más de 900 mil seguidores en la aplicación china Douyin, el equivalente aa Tiktok. Allí compartía videos bailando, viajando y riendo.
Pero la mujer de 30 años, murió calcinada por su exmarido, un hombre quien le prendió fuego mientras transmitía en vivo desde su cocina.
Anteriormente, Lhamo ya había pedido pidió el divorcio en mayo de 2020, luego de que el agresor le rompiera un brazo, sin embargo, la convenció de que se volvieran a casar bajo la amenaza de hacerle daño a sus dos hijos.
La pareja contrajo nupcias de nueva cuenta pero Lhamo se divorció otra vez en julio y Tang Lu empezó a acosarla hasta su muerte.
Pena de muerte para su asesino
Recientemente, el tribunal de Pekín emitió una sentencia de muerte contra Tang Lu y calificó el crimen como "extremadamente cruel y con impacto social extremadamente malo".
La muerte de Lhamo desató indignación en el país, pues ciudadanos demandan mejor protección de las mujeres que resultan víctimas de violencia doméstica en China. Según estadísticas, mil 214 muertes han sido a causa de violencia doméstica entre 2016 y 2019.
JLE