Después de hacerse virales por la fiesta que protagonizaron los influencers a bordo de un avión el 30 de diciembre, desde Montreal con destino a Cancún, los jóvenes son investigados por las autoridades canadienses pertinentes y podrían enfrentarse a cuantiosas multas.
El gobierno de ese país abrió una investigación contra los organizadores de la fiesta y sus participantes, quienes podrían ser multados con hasta 5 mil dólares canadienses, poco más de 80 mil pesos mexicanos.
En un comunicado, reiteraron:
Nuestro gobierno se toma muy en serio los incidentes denunciados como estos. Hemos ordenado a nuestros respectivos funcionarios departamentales que inicien de inmediato una investigación sobre estas acusaciones de incumplimiento de las normas contra la COVID-19 y las reglas y regulaciones de seguridad aéreaGobierno de Canadá
La seriedad con la que toman lo sucedido no es para menos, pues Montreal es uno de los epicentros de la pandemia en Canadá debido al repunte de casos por la variante Ómicron. Incluso Justin Trudeau, presidente de ese país, calificó la irresponsabilidad de los influencers como una “bofetada en la cara” para su gobierno y la sociedad canadiense, que procuran las medidas necesarias para evitar nuevos contagios.
El organizador de la fiesta en el avión, James William Awad, declaró que en ningún momento se violaron las normas ni protocolos relativos a las medidas sanitarias contra el COVID-19, aunque en las imágenes que pululan por Internet los pasajeros del vuelo bailaron, bebieron y fumaron sin guardar distancia y sin mascarillas.
En Twitter, Awad señaló que se trató de “una simple fiesta en un avión”, pero Sunwing, la compañía a la que alquiló el avión, denunció el comportamiento de los influencers ante el Ministerio de Transporte de Canadá y canceló su vuelo de regreso. De la misma forma, otras compañías aéreas canadienses se han negado a llevar al grupo de vuelta a Canadá para no arriesgar a otros pasajeros, por lo que los jóvenes aún permanecen en México.
CEHR