ACNUR registra 100 mil desplazados y prevé hasta 5 millones

Inicia éxodo ucraniano: “hoy tuve el peor día de mi vida”

Familias enteras buscan protegerse de las detonaciones en estaciones del metro; otros más buscan refugio en naciones vecinas; Polonia, Hungría, República Checa... abren fronteras

Personas se refugian en una estación de metro, después de que el presidente ruso, autorizara el ataque militar en Kiev.
Personas se refugian en una estación de metro, después de que el presidente ruso, autorizara el ataque militar en Kiev. Foto: Reuters

Entre el miedo, la confusión y el cansancio, cientos de ucranianos buscaron refugio en estaciones del metro y otros más abandonaron sus hogares para huir al extranjero.

De acuerdo con varios testimonios y videos que ucranianos compartieron en las redes sociales, familias con niños, y hasta sus mascotas, se dirigieron a estaciones del para protegerse de las explosiones del Ejército ruso desde la madrugada del jueves y que no han parado.

Muchos, incluso, aún dormían cuando las detonaciones de misiles los despertaron porque perforaron el departamento donde vivían. Es el caso de Mikhail Shcherbakov en Jarkov, quien narró a la agencia AP que se trató del peor amanecer de su vida.

“Escuché ruido y me desperté. Me di cuenta de que sonaba como artillería. Hoy tuve el peor amanecer de mi vida”, dijo al medio estadounidense.

Shcherbakov describe que saltó del sillón y corrió a despertar a su madre, enseguida, sintió explotar el misil que cubrió de polvo una computadora y una taza de té.

Pero esta angustia que vivió el ucraniano se repitió en miles de hogares en varias ciudades de Ucrania tras la embestida rusa, poco después las calles comenzaron a registrar, pese a la temprana hora de la mañana, una gran movilización. Se trataba de ucranianos caminando por las calles, huyendo hacia donde se pudieran de los estallidos que les confirmaban que, al menos en su país, la guerra había comenzado.

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. ı Foto: Gráfico: La Razón de México

La idea era protegerse, estar a salvo. El lugar, los túneles y escaleras en las estaciones del Metro.

En Kiev, el alcalde Vitali Klitschko anunció a la par del toque de queda que las estaciones del metro queden habilitadas para dar refugio durante las 24 horas del día en caso de más ataques. Klitschko también llamó a sus compatriotas a alistar artículos de primera necesidad, medicamentos y documentos en bolsas.

Tras las imágenes que circularon en Twitter, hubo varios internatutas que compararon la escena con lo que se registró en el Metro de Londres, en 1941, cuando la gente buscó protección ante los bombardeos de Hitler.

En otra parte de la capital, reportó AP, Anna Dovnya estaba aterrorizada. Veía cómo los soldados y la policía retiraban la metralla de un proyectil que explotó. “Hemos perdido toda la fe”, dijo.

“Hasta el último momento, no creí que sucedería. Simplemente, hice estos pensamientos a un lado”, comentó.

Y mientras transcurría la mañana, las cosas empeoraron. El sentimiento de moverse más allá de un túnel del metro hizo a miles encaminarse hacia las afueras de Ucrania. Polonia, Rumania, Moldavia, Hungría... donde fuera que los alejara de las balas, de la angustia por conservar la vida. Una angustia más en medio de la pandemia sanitaria que enfrenta el mundo.

De acuerdo con un portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Shabia Mantoo, se estima que al menos cien mil personas se están desplazando para buscar refugio en el extranjero.

Ante ello, Filippo Grandi, alto comisionado de la ACNUR, solicitó a gobiernos de países vecinos “dejar las fronteras abiertas para las personas que buscan seguridad y protección. Estamos listos para apoyar los esfuerzos de todos para responder a cualquier situación de desplazamiento forzado”.

Por eso, naciones como Alemania y Estados Unidos mostraron su disposición para ayudar ante una “masiva” llegada de refugiados” a los países vecinos.

La ministra del interior alemán, Nancy Faeser, expresó que se apoyaría a las naciones que registraran una importante llegada de ucranianos, como Polonia, donde decenas llegaron a pie.

La República Checa se unió al llamado y ofreció apoyo para los ucranianos que llegaran a su territorio.

Desde la Casa Blanca, la vocera Jen Psaki, aseguró que su país se encontraba listo para recibir a desplazados, los que con suerte podrán cruzar alguna frontera. Los que no, seguirán intentándolo para sobrevivir, como Maxium, quien recorrió en vano por la ciudad desde el amanecer en busca de dinero en efectivo o llenar su tanque de gasolina.

“No puedo hacer nada. Estoy atrapado aquí”, dijo a AP, en un panorama desesperanzador, tan sólo en el primer día de la ofensiva rusa.