La farmacéutica AstraZeneca reconoció que su vacuna contra Covid-19 tiene limitantes para actuar contra la variante sudafricana 501.v2, por lo que ya analiza adecuar su biológico ante esta cepa.
Su biológico tiene menor efectividad ante la mutación que surgió a finales del año pasado en el continente africano, reveló Financial Times, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Witwatersrand, pues es menor al 50 por ciento establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Reduce significativamente la eficacia contra la variante sudafricana”, se detalla en el informe de fases 1 y 2 sobre un grupo de dos mil voluntarios, que prevén se publique hoy, a unos días de que la firma Novavax reportara que su vacuna alcanza un nivel de protección de apenas 49 por ciento ante una de las mutaciones que genera preocupación, como la británica (B.1.1.7) y la brasileña (P.1); mientras que otras farmacéuticas como Pfizer y Moderna aseguran que la suya puede ser ligeramente menor, pero sí es efectiva.
Según las pruebas, 10 por ciento de las personas que recibieron la dosis resultó infectada con la mutación de Covid.
Se puntualizó que pese a los efectos mínimos contra la cepa 501.v2, ninguno de los participantes en el estudio presentó síntomas graves, aunque de acuerdo con algunos medios los voluntarios eran adultos jóvenes sanos, con una edad promedio de 31 años.
Horas después, la farmacéutica adelantó que busca adecuar su inmunológico para garantizar mayor protección, ya sean para casos leves o severos; pero insistió en que su dosis cuenta con anticuerpos neutralizantes para actuar contra otras mutaciones, como ésta que ya se extendió a más de 32 países.
Sara Gilbert, directora del programa de la vacuna en colaboración con la Universidad de Oxford, apuntó que, aunque aún no se conocen más estudios sobre la respuesta de la vacuna contra la cepa sudafricana, ya comenzaron los ajustes.
Y adelantó que probablemente el biológico esté listo para el otoño, si es necesario entregar nuevos biológicos a los países con lo que ya pactaron entregas.
Pues la batalla de la pandemia no sólo es contar con la inoculación sino garantizar que los refuerzos reducen ampliamente el contagio, incluidas personas infectadas a pacientes sanos, y especialmente contra las nuevas variantes, que se han convertido en una amenaza real y por la que algunas naciones decretaron cierres de fronteras y a viajeros o la implementación de doble cubrebocas, como en Estados Unidos. Al respecto, el investigador de AstraZeneca, Shabir Madhi, admitió que el surgimiento de otras variantes los obligaría a “recalibrar”.
Además, la farmacéutica recordó que estudios recientes revelan que esta protección dura hasta 90 días, por lo que optaron por retrasar la aplicación de la segunda dosis 12 semanas en comparación con otras que tienen intervalos de tres y cuatro semanas.
SUDÁFRICA FRENA APLICACIÓN. A unos días de recibir más de un millón de unidades de la vacuna y luego de que se difundiera que la de AstraZeneca no es tan efectiva contra la cepa sudafricana, este país suspendió su distribución.
El ministro de Salud del país, Zweli Mkhize, confirmó que se suspendió el plan de vacunación, pese a las grandes esperanzas de inmunizar al personal sanitario, pues datos recientes evidencian que el biológico da mínima protección ante la cepa que surgió en este país, en el lque se acumulan 46 mil muertos y que por su rápida propagación podría convertirse en la dominante. Y dijo que esperan la asesoría de especialistas para determinar en qué casos se puede aplicar.
Por lo anterior, los biológicos se mantendrán en almacenes en espera de nuevos resultados y mientras suministrará dosis de Johnson & Johnson y de Pfizer.
Además, personal sanitario advirtió que ya se habían detectado casos de vacunas que no protegen a quienes incluso ya contrajeron otras variantes.
No obstante, AstraZeneca aseveró que los ensayos realizados muestran que sí da seguridad contra casos graves y ayuda a reducir la cifra de hospitalizaciones.
Un portavoz agregó que no se ha certificado su efecto adecuadamente, ya que los ensayos fueron con adultos jóvenes.
El estudio se revela luego de que países de Europa, como España y Bruselas, señalaron que no aplicarán el biológico a pacientes de más de 55 años al señalar que no hay pruebas de los efectos que tiene en este grupo, pues no contemplaron voluntarios de este rango de edad.