Tras cumplirse 16 años de la desaparición de Madeleine McCann, quien ahora tendría 20 años, Portugal reactivó su búsqueda para esclarecer el caso.
La policía ibérica desplegó un operativo con el respaldo de fuerzas británicas y alemanas y comenzó un rastreo desde el complejo turístico de Algarve, en Praia da Luz, donde se le vio por última vez a la pequeña originaria de Gran Bretaña, lo que atrajo a curiosos, pero se restringió el paso terrestre y operaciones aéreas, al prohibir el sobrevuelo de aviones, helicópteros y hasta drones, luego de que se reportara que agentes realizan excavaciones y que buzos ingresaron a la presa de la zona.
Debido al cerco sólo circulan imágenes de agencias en donde se ven carpas azules en donde se realizan las excavaciones y varias patrullas, esto como parte de una cuarta operación de tras los despliegues en 2007, 2013 y 2020, ésta última fuera de Portugal.
Según medios locales Alemania presionó para reanudar labores en busca de nueva evidencia, pese a la baja probabilidad pues ya pasó más de una década.
El objetivo es conseguir pistas al recordar que a lo largo de estos años hubo dos principales sospechosos.
Uno de ellos es de origen alemán, Christian Brueckner, quien lleva años en prisión por otros delitos, mientras que Robert Murat, de GB, fue detenido por su posible participación en el secuestro, luego de que se identificara como sospechoso a un hombre de entre 20 y 40 años que rondó el apartamento donde se quedó la familia de Madeleine.
El primero de ellos sería la razón para reanudar estas acciones, pues conocía la zona donde desapareció Madeleine como su “pequeño paraíso”; sin embargo, ese gobierno se reservó el motivo de la nueva búsqueda en espera de resultados.
Pero insistió en abundar en la búsqueda para dar con más datos, al recordar que casi una década después Brueckner fue encarcelado por violar a una turista cerca de ahí y se sospecha que abusó sexualmente de otras, principalmente menores de edad, entre el 2000 y 2017, por lo que en la zona podría haber rastros bajo tierra.
Sus padres, quienes fueron señalados como sospechosos y respondieron legalmente por atacar su credibilidad y manchar su reputación, no se han pronunciado en torno a las acciones que empezaron este 23 de mayo, pero hace meses recordaron que nunca abandonaron la búsqueda de la menor.
Durante este largo tiempo han surgido historias de niñas que podrían corresponder a la pequeña desaparecida y hasta que podría estar muerta, pero la Policía descartó tales versiones, incluso en algunos casos desestimaron las supuestas pistas y rechazaron realizaron pruebas de ADN.
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Leo
