Ucrania recibirá próximamente este tipo de misiles por parte de Francia, luego de que Macron hizo el anuncio a su llegada a la cumbre de la OTAN en Vilna, al informar que este paso suplementario en el equipamiento militar es por la situación sobre el terreno y la contraofensiva de Ucrania para tratar de recuperar territorio ocupado por Rusia. Estos nuevos artefactos son los Système de Croisière Conventionnel Autonome à Longue Portée (Scalp), los mismos que Londres entregó a Kiev hace meses con el nombre de Storm Shadow; y que se disparan desde aviones, alcanza una velocidad de más de 1,000 km/h, una altura de hasta 40 metros y una distancia de 560 kilómetros, mientras que la ruta de su vuelo se guía por un GPS. Esta arma, según informan medios internacionales, no se puede controlar una vez disparado y es muy difícil de detectar, según expertos; ya que ha sido diseñado para alcanzar buques o submarinos, pero también es capaz de atacar aeródromos, almacenes de municiones y diversas instalaciones estratégicas.
Gráficos: Julio Loyola, Roberto Alvarado y Luisa Ortega.
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Misil Scalp
