Este jueves Japón eliminó la prohibición de nuevas reservas de viajes internacionales hacia el país como medida de defensa ante Ómicron, la nueva variante del coronavirus, debido a las críticas de que era una reacción exagerada.
El Ministerio de Transporte emitió el miércoles una solicitud a las aerolíneas internacionales para que dejen de tomar nuevas reservas para vuelos que lleguen a Japón hasta fines de diciembre como precaución de emergencia para defenderse de la nueva variante de ómicron.
Sin embargo, este jueves ministerio se retractó de la solicitud después de recibir críticas acerca de que la prohibición era demasiado estricta y equivalía a "abandonar a los ciudadanos japoneses".
Al respecto, el primer ministro, Fumio Kishida, afirmó que ha dado instrucciones al Ministerio de Transporte para que "preste total atención a las necesidades de los ciudadanos japoneses de regresar a casa”
La solicitud tenía como objetivo reducir las llegadas internacionales diarias de Japón a tres mil 500 desde un nivel anterior de cinco mil para endurecer los controles fronterizos a medida que la nueva variante se extendía por todo el mundo, dijeron las autoridades.
"La solicitud, emitida como precaución de emergencia, provocó confusión", dijo el jueves a la prensa el secretario jefe del gabinete, Hirokazu Matsuno. Agregó que el Ministerio de Transporte se ha retractado de la solicitud de un paro uniformado de nuevas reservas.
Pero se mantiene un límite diario de tres mil 500 llegadas. Se pueden realizar nuevas reservas siempre que haya espacio por debajo de este límite, dijo el funcionario del Ministerio de Transporte, Hitoshi Inoue.
Cabe mencionar que el gobierno de Japón informó dos casos de la variante ómicron, de la cual se informó por primera vez en Sudáfrica la semana pasada.
RFH
