La oposición argentina se perfila como la ganadora de la elección intermedia al quitarle el control del Senado a la alianza Frente de Todos del presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner tras casi cuatro décadas (1983), obligándolo a negociar en el Congreso.
Con más de 90 por ciento de los votos escrutados, la coalición de centroderecha Juntos por el Cambio dio un duro golpe al gobierno, evidenciando el castigo de la población por una mala gestión en medio de la pandemia de Covid, por la que el país ya suma 116 mil muertos, hecho que ya se adelantaba desde septiembre pasado con las primarias.
Asimismo, consideran que el peor revés viene del sector inconforme con la economía por el aumento de la pobreza en la nación, golpeando a casi la mitad de la población, hecho que se refleja en una alza en el desempleo y la inflación imparable que alcanzó 50 por ciento anual.
Debemos priorizar los acuerdos nacionales si queremos resolver los desafíos a los que nos enfrentamosAlberto Fernández<br>Presidente de Argentina
Tras los resultados, el mandatario aseveró que profundizará sus esfuerzos para alcanzar un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), acerca de la refinanciación heredada, y mejorar la economía nacional; asimismo, adelantó que espera una oposición abierta al diálogo para alcanzar el bienestar social.
De acuerdo con los cómputos, hasta el cierre de esta edición, la oposición derrotó por una diferencia muy pequeña al gobierno en Buenos Aires con 39.97 por ciento contra 38.45.
Con este resultado, los kirchneristas se quedan con sólo 35 escaños, dos por debajo de los 37 para no depender de otros, umbral que le permitiría manejar el Congreso como ahora. También se queda a seis lugares de los 41 que tenían hasta el momento; es decir, que, de confirmarse el conteo, a partir de diciembre perderá la comodidad con la que aprobó los decretos presidenciales, lo que conlleva a reesquemar alianzas para alcanzar las votaciones en favor de la gestión de Fernández, por lo que ya voltean hacia dos aliados oficialistas, los legisladores Alberto Weretilneck y Magdalena Solari, quienes les ayudarían a recuperar esa ventaja; mientras que el partido de derecha Libertad Avanza advirtió a Fernández que no se sentará a negociar con el mandatario.
Se rompió la hegemonía en el Senado tres años antes de lo que teníamos pensado, esto ya es importanteAlianza Juntos por el Cambio
En tanto, sus rivales, partido al que pertenece el exmandatario Mauricio Macri, quedan con 31 lugares, por lo que tampoco les alcanza para tener el control, pero celebran, pues se rompe la hegemonía en la Cámara alta antes de lo planeado, pues estimaban arrebatarles la mayoría hasta la elección presidencial de 2023.
En torno a la disputa por provincias, se reportó que el Frente de Todos ganó en Tucumán y Catamarca, en ambos con casi 50 por ciento del voto. Mientras que Juntos por el Cambio ganó seis provincias: Chubut, La Pampa, Corriente, Mendoza, Santa Fe y Córdoba.
