Los países miembros de la OTAN acordaron ayer iniciar la planificación de un apoyo militar a largo plazo para Ucrania. La propuesta fue presentada por el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, y contempla un plan de cinco años con un fondo de 100 mil millones de euros para la coordinación de armas, municiones y equipos.
Países como Alemania calificaron el plan como “correcto e importante”; otros, como España y Hungría, expresaron escepticismo ante su viabilidad. El ministro húngaro de Asuntos Exteriores, Peter Szijjarto, aseguró que no respaldará “ninguna propuesta de la OTAN que pueda acercar a la alianza a la guerra”.
La propuesta busca que la OTAN asuma parte del trabajo de coordinación de una coalición liderada por Estados Unidos, con el objetivo de protegerse contra posibles recortes en el apoyo por parte de Washington, especialmente en caso de un eventual regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.
Mientras tanto, en Ucrania, el presidente Volodimir Zelenski firmó una ley que reduce la edad mínima de reclutamiento en el país de 27 a 25 años. Esta medida tiene como objetivo aumentar la cantidad de hombres disponibles para luchar.