El expremier neerlandés Mark Rutte asumió como líder de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y su prioridad será Ucrania.
A dos años y medio de la invasión rusa, que obligó a extender el mandato de Jens Stoltenberg, el político de 57 años se dijo listo para reforzar la unidad alrededor del gobierno de Volodimir Zelenski, pues su resistencia fortalece la seguridad global y encamina a sus tropas a la victoria.
Para tales refuerzos recalcó el llamado a incrementar el gasto en defensa, pues sólo así garantizarán el compromiso inquebrantable con Kiev, ante los constantes llamados de esa nación a enviar armas y equipos de defensa y permitir el uso de ese armamento contra Moscú.
En su primera declaración sobre sus planes envió un mensaje al presidente ucraniano al recalcar que toda esta ayuda permitirá que en el corto plazo se concrete la adhesión de esa nación; aunque varios gobiernos insisten que ello ocurrirá hasta el fin de la guerra, por lo que no adelantan fechas.
Para este nuevo arropo a Ucrania, Mark Rutte aseveró a medios que sigue muy de cerca a Estados Unidos, y sin importar quien gane la elección de noviembre próximo, mantendrá el liderazgo y la ruta que marcó Jens Stoltenberg en una década, lo que recuerda que el contendiente republicano, Donald Trump, amagó con reducir la inversión en la materia si vuelve a la Casa Blanca.
