Por sus esfuerzos para combatir el hambre en regiones con conflictos y dificultades, mientras la pandemia por el Covid-19 lleva a millones de personas al borde de la hambruna, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de las Naciones Unidas fue reconocido ayer con el Premio Nobel de la Paz 2020.
El organismo, con sede en Roma, que ayuda a unos 100 millones de personas en unos 88 países cada año, se ha especializado en llevar ayuda a los sitios más peligrosos y precarios en el mundo, lanzando comida desde el aire en Sudán del Sur y Siria, o creando un servicio de entrega de emergencia que mantuvo la ayuda cuando las primeras restricciones por la pandemia de Covid suspendieron los vuelos comerciales.
Durante el anuncio del premio, el Comité Noruego del Nobel manifestó que deseaba “volver los ojos del mundo hacia los millones de personas que sufren o enfrentan la amenaza del hambre”.
El PMA es un motor detrás de los esfuerzos para impedir el uso del hambre como un arma de guerra y conflicto, y la pandemia del Covid-19, que según la agencia, podría duplicar las necesidades alimenticias en el mundo, lo ha hecho más relevante, indicó.
“La pandemia del coronavirus ha contribuido a un fuerte alza del número de víctimas de hambre en el mundo. Hasta el día en que haya una vacuna médica, la comida es la mejor vacuna contra el caos.
“Existe una estimación dentro del PMA de que (...) habrá 265 millones de personas con hambre en un año, así que por supuesto esto también es una llamada a la comunidad internacional para que no subfinancie al PMA”, agregó.
La presidenta del comité, Berit Reiss-Andersen, agregó que espera que el premio destaque la necesidad de fortalecer la solidaridad y cooperación mundial en una época de nacionalismos.
“Estamos enviando una señal a todas las naciones que planteen objeciones a la cooperación internacional, una señal a este tipo de nacionalismo en el que no se está enfrentando la responsabilidad de los asuntos internacionales. La cooperación multilateral es absolutamente necesaria para combatir los desafíos globales. Adicionalmente, el multilateralismo parece tener una falta de respeto en estos días”, dijo.
La pandemia del coronavirus ha contribuido a un fuerte alza del número de víctimas de hambre en el mundo. Existe una estimación dentro del PMA de que (...) habrá 265 millones de personas con hambre en un añoComité Noruego del Nobel
En un videocomunicado que difundió en redes sociales, el director ejecutivo del PMA, David Beasley, de viaje en Níger, celebró el galardón: “Es por la familia del PMA. Están ahí fuera en los lugares más difíciles y complejos del mundo, donde hay guerra, conflicto, extremos climáticos, no importa. Están ahí fuera y se merecen este premio. Es la primera vez que me quedo sin palabras (...) Es increíble”.
En un comunicado posterior, agregó: “Hoy es un recuerdo de que la seguridad alimentaria, la paz y la estabilidad van juntos. Sin paz no podemos lograr nuestro objetivo mundial de hambre cero; y mientras haya hambre, nunca tendremos un mundo pacífico”.
El premio se produce luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump retiró a su nación de varios organismos de la ONU, incluido el CDH y la UNESCO, y adelantó que dejará la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2021.
FGR