La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) aseguró que los traficantes de personas aprovecharon la emergencia sanitaria por COVID-19 para reclutar a nuevas víctimas a través de redes sociales.
El informe Los efectos de la pandemia de Covid-19 en la trata de personas y las respuestas a los desafíos detalla que los delincuentes trasladaron la explotación sexual en adultos y niños a otros lugares, como casas o departamentos privados, después de que las autoridades realizaron cierres de espacios de esparcimiento como bares o cantinas.
El Jefe de la Sección de Trata de Personas y Tráfico de Migrantes de UNODC, Ilias Chatzis, explicó que los tratantes atraen a las personas con falsas oportunidades de empleo; además, los menores son reclutados vía digital, ya que son la prioridad de las bandas organizadas.
Los traficantes se adaptaron rápidamente a la nueva normalidad; respondieron al cierre de bares, clubes y salones de masajes, donde puede ocurrir la explotación, simplemente trasladando su negocio ilegal a propiedades privadas o en líneaIlias Chatzis
El reporte afirma que, debido a los confinamientos, las víctimas sufrieron limitaciones en la lucha contra la trata, además que muchas de las víctimas rescatadas en vez de ser trasladadas a sus casas, permanecieron en albergues, lo que afectó su salud emocional.
MAEP
