Desafía denuncia de la derecha

Pedro Sánchez se queda en el poder... “con más fuerza”

En un discurso tras una reflexión de 5 días el Ejecutivo español puso fin a la incertidumbre política; se lanza contra rivales por mentiras y hasta insidia

El líder español, ayer, al dar un mensaje a la nación.
El líder español, ayer, al dar un mensaje a la nación. Foto: Reuters

El presidente de España, Pedro Sánchez, descartó renunciar, al desafiar los intentos de la derecha y de la ultraderecha para debilitarlo tras ataques a su esposa Begoña Gómez, quien fue denunciada por presunta corrupción.

“He decidido seguir, con más fuerza si cabe”, anunció en un discurso a la nación al romper el silencio de los cinco días que se tomó para reflexionar, pues asestó a sus rivales políticos que no dejará que ganen las mentiras, el odio, la falsedad y la insidia.

Luego de adelantar la decisión al rey Felipe VI y a su gabinete, rememoró en público que desde hace una década comenzó el acoso en su contra, pero se dijo listo para enfrentarlo luego de evaluar la continuidad en el poder y aceptar que dichos ataques no se acabarán.

Por ello, el también líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) optó por defender la democracia ante los actos que consideró pudieron provocar un daño irreparable, en referencia a la embestida contra su esposa y primera dama, quien prevén sea citada a declarar por la justicia en torno a supuestas irregularidades por tráfico de influencias.

Asimismo, Pedro Sánchez enfatizó a la oposición que ni el fango ni las prácticas tóxicas dirigirán la vida política de la nación al llamar a dar vuelta a la página con “un punto y aparte”, según su discurso que horas después fue compartido en redes sociales.

Plan con el que exhortó a dicho sector a tomarse también un tiempo y reflexionar con claridad y de manera colectiva sobre su conducta para mantener los principios democráticos por el bien del país. Agregó que ésa es la única vía para convertirse en la sociedad a la que aspiran bajo criterios de dignidad y sentido común, para ser de nuevo un referente e inspiración en la Unión Europea (UE) y a nivel mundial, al propinarle un nuevo golpe a la oposición de cara a las elecciones parlamentarias en la región.

Con su declaración el mandatario puso fin a la incertidumbre que hacía temer que se convocara a nuevos comicios, pero también desató críticas, pues sus rivales lo acusaron de aprovechar el caso para victimizarse, como dijeron el Partido Popular y Vox.

Mientras que hasta su aliado independentista Junts —formación con la que negoció la amnistía— le recriminó que con ese escenario político intentó opacar el proceso electoral que Cataluña programó para mayo próximo, en el posible regreso de Carles Puigdemont.