Una llamada telefónica entre los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y de Francia, Emmanuel Macron, dejó una nueva alerta sobre la escalada de la guerra en Ucrania.
Luego de la conversación de hasta hora y media, el mandatario galo admitió que “lo peor está por venir”, pues su homólogo le aseguró que la incursión militar en Ucrania avanza según lo previsto, evidenciando que no hay un plan para retroceder.
Y agregó que ante esta postura es claro que Ucrania se enfrenta a “los días más duros”.
Fuentes del gobierno francés señalaron que Macron le hizo ver al líder del Kremlin que cometió un grave error, pues no hay ninguna justificación para esta invasión; sin embargo, el responsable de una nueva guerra en Europa le ratificó su determinación de mantener la operación de desmilitarización y hasta acusó a Ucrania de cometer presuntos crímenes de guerra, cuando la comunidad internacional responsabiliza de éstos a su gobierno.
Por lo anterior, Macron no descarta imponer nuevas sanciones en su contra.
Por separado, el gobierno ruso detalló que no pretende hacer concesiones en este conflicto, por el contrario podría aumentar la lista de demandas para terminar con la incursión, esto mientras corre una segunda ronda de diálogo entre autoridades de Ucrania y de Rusia en la frontera con Bielorrusia.
Asimismo, el Palacio del Elíseo destacó que esta conversación se buscó desde el pasado 24 de febrero cuando comenzaron los bombardeos contra Kiev, la capital ucraniana.
FGR