Por primera vez, el Vaticano dio a conocer hoy un detallado presupuesto, estado financiero y declaración de ingresos en un momento en que busca garantizar a sus fieles que habla en serio sobre reformar su ley de información financiera, después de un escándalo de corrupción que ha puesto en evidencia un mal manejo fiscal.
Es la primera vez desde 2016 que el Vaticano difunde información sobre sus finanzas, pese a la promesa hecha por el papa Francisco desde el inicio de su pontificado en 2013 de una mayor transparencia y rendición de cuentas sobre el dinero de la Santa Sede.
Reduce su déficit
Los datos muestran que la burocracia en el Vaticano ha reducido su déficit de 75 millones de euros en 2018 a 11 millones el año pasado, incluso tomando en cuenta una caída de 25 millones de euros en donaciones de diócesis e individuos por igual.
Pero más allá del informe de ingresos, el reporte consolidado representa la primera información difundida públicamente de la que se tenga conocimiento sobre el patrimonio neto del Vaticano, calculado en 1.400 millones de euros (1,600 millones de dólares) para la curia de la Santa Sede, o burocracia.
El patrimonio total del Vaticano alcanza los 4,000 millones de euros (4,700 millones de dólares) al tomarse en cuenta los Museos del Vaticano, el banco del Vaticano y otras fuentes de recursos y fondos.
El reporte también es considerado la primera vez que el Vaticano revela abiertamente la manera cómo su presupuesto operativo se distribuye entre las distintas oficinas de la Santa Sede, que funge como el gobierno central de la Iglesia católica.
Sorprendentemente, la Congregación de la Doctrina de la Fe —probablemente la oficina más conocida del Vaticano en los últimos años porque procesa todos los casos de abuso sexual cometidos por el clero— opera con un presupuesto anual de 3.36 millones de euros.
KA