En un hecho que las autoridades dicen que parece no estar relacionado con el terrorismo, un automovilista afroamericano, seguidor del Islam, embistió con un vehículo dos policías que se encontraban en una barricada afuera del Capitolio de Estados Unidos y blandió un cuchillo, matando a un oficial e hiriendo a otro, luego de lo cual los agentes lo abatieron.
Sin embargo, los atentados terroristas en los que se utilizan cuchillos y vehículos motorizados lanzados contra transeúntes se han multiplicado en los años recientes.
Yogananda Pittman, jefa interina de la Policía del Capitolio, informó en conferencia de prensa que un video muestra cuando el conductor chocó su unidad contra los oficiales, luego se fue contra una barricada y salió del auto con un cuchillo en la mano, corriendo hacia los agentes.
Dos funcionarios que hablaron bajo condición de anonimato, dijeron a AP que en un principio los investigadores creían que el sospechoso apuñaló a uno de los agentes, pero después no estaba claro si el cuchillo realmente lo tocó, en parte porque el vehículo golpeó a los policías con mucha fuerza.
Las autoridades balearon al sospechoso, quien resultó herido. Tanto él como los oficiales fueron trasladados a un hospital, donde posteriormente fallecieron el atacante y un policía.
Jill y yo quedamos devastados al escuchar sobre este violento ataque en un punto de control en el predio del Capitolio de los Estados Unidos. Enviamos nuestras más sentidas condolencias a la familia del oficial EvansJoe Biden, Presidente de EU
“Es con un corazón muy, muy apesadumbrado, que anuncio que uno de nuestros oficiales ha sucumbido a sus heridas. Esta ha sido una época extremadamente difícil para la Policía del Capitolio federal luego de los eventos del 6 de enero, y ahora con lo que ha ocurrido aquí hoy (ayer)”, dijo Pittman.
La policía identificó al agente fallecido como William Evans, un veterano con 18 años de servicio que era miembro de la unidad de primeros auxilios del departamento.
Las autoridades dijeron que no había una amenaza en curso y que el ataque no parecía estar relacionado al terrorismo, aunque el complejo del Capitolio fue cerrado como precaución. De momento no había una conexión inmediata entre el incidente del viernes y los disturbios del 6 de enero.
“No parece estar relacionado con el terrorismo, pero obviamente continuaremos investigando para ver si hay algún vínculo de ese tipo. Necesitamos entender la motivación detrás de este acto sin sentido”, dijo Robert Contee, jefe interino del Departamento de Policía Metropolitana de Washington.
Funcionarios policiales identificaron al sospechoso como Noah Green, de 25 años. Los investigadores indagaban sus antecedentes y examinaban si tenía problemas de salud mental con el fin de dilucidar el móvil del ataque, pues era desconocido para ellos. También trataban de obtener órdenes judiciales para tener acceso a sus cuentas en internet.
“Claramente, se trataba de alguien que estaba tratando activamente de llegar a quien sea o lo que sea, simplemente no lo sabemos en este momento. Ya sea que el ataque fue contra la policía o quien sea, tenemos la responsabilidad de llegar al fondo y lo haremos”, dijo Contee.
Luego de los hechos, el presidente Joe Biden dijo en un comunicado que él y su esposa Jill, están desconsolados y “tenemos el corazón roto tras enterarnos del violento ataque” y expresaron sus condolencias a la familia de Evans. Ordenó que las banderas de la Casa Blanca ondearan a media asta, en tanto que la del Capitolio también fue bajada a media asta.
El Congreso está listo para ayudar a las fuerzas del orden con una investigación rápida y completa sobre este atroz ataqueNancy Pelosi, Presidenta de la Cámara de Representantes
El choque y los disparos ocurrieron en un retén de seguridad cerca del Capitolio, que suele ser utilizado por legisladores y personal entre semana, aunque la mayoría se encuentran fuera del edificio debido al feriado de Semana Santa. El ataque se llevó a cabo a unos 90 metros de la entrada del lado del Senado. Un testigo, el reverendo Patrick Mahoney, dijo que estaba concluyendo una ceremonia por el Viernes Santo cerca de allí cuando escuchó tres disparos.
Las agencias de espionaje de EU advirtieron a mediados de marzo de una amenaza constante de que extremistas violentos por motivos raciales, como los supremacistas blancos, llevarán a cabo ataques con víctimas en masa contra civiles, mientras que los grupos de milicias apuntan a la policía y al personal y edificios del gobierno.
Desde el atentado en Niza, Francia, en 2016, cuando un camión embistió a una multitud, los ataques con vehículos y navajas para provocar terror en la gente se han incrementado en diversos países del mundo.
- El dato: Evans es el segundo oficial del Capitolio que muere este año: durante los ataques del 6 enero, Brian Sicknick perdió la vida tras sufrir lesiones intentando detener a los atacantes.