La Guardia Costera de Grecia rescató a casi 500 migrantes después de que el barco pesquero en el que viajaban pidiera ayuda al quedarse varado frente a las costas de la isla de Greta.
Aunque no se confirmó el número total, un vocero del servicio de emergencia griego detalló que la embarcación solicitó ayuda, al reportar que perdió el timón y quedó a la deriva tras su paso por aguas agitadas y llevaba a cientos de indocumentados a los que habían recogido en su ruta hacia Grecia, lo que revela un posible sobrepeso de la unidad.
Tras la emergencia, decenas de transportes marítimos, como cargueros y cisternas, se unieron al rescate de los tripulantes del pesquero, quienes presuntamente proceden de Libia y Egipto, de acuerdo con medios locales.
Pese a la polémica por el rechazo de algunos países a los indocumentados, en ésta ocasión las autoridades griegas confirmaron que recibirían a estas personas que buscan asilo, pues fueron trasladados a la ciudad costera. Hecho al que se sumaron Alemania y Francia que en las últimas semanas han aceptado a ilegales para evitar que uno de los integrantes de la Unión Europea (UE) asuma toda la carga migratoria.
Lo que contrasta con Italia que endureció las medidas ante el arribo masivo de migrantes en embarcaciones pesqueras y de organizaciones humanitarias, pues se ha negado a aceptar a todos los que llegan a bordo de éstas, quienes en su mayoría proceden de Medio Oriente, África y Asia.
En tanto, algunos medios señalaron que estas nuevas cifras exponen que los traficantes de migrantes emplean rutas cada vez más largas y peligrosas para acercar a territorio europeo a los ilegales que huyen de la pobreza y hasta conflictos, sin importar el peligro al que los exponen. Travesía en la que los principales puntos de acceso son España e Italia, además de Grecia.
RFH
