Rusia informó este miércoles que realizó un lanzamiento de prueba de su misil balístico intercontinental Sarmat, una nueva adición a su arsenal nuclear que, según el presidente Vladimir Putin, daría a los enemigos de Moscú “algo en qué pensar”.
A Putin se le mostró en la televisión cuando militares le informaban que el misil se había lanzado desde Plesetsk, en el noroeste del país, y que había alcanzado objetivos en la península de Kamchatka, en el extremo oriente.
“El nuevo complejo tiene las características tácticas y técnicas más altas y es capaz de superar todos los medios modernos de defensa antimisiles. No tiene análogos en el mundo y no los tendrá durante mucho tiempo”, dijo Vladimir Putin.
“Esta arma verdaderamente única fortalecerá el potencial de combate de nuestras fuerzas armadas, garantizará de forma fiable la seguridad de Rusia frente a amenazas externas y dará que pensar a aquellos que, en medio de una retórica frenéticamente agresiva, intentan amenazar a nuestro país”, agregó.
El Sarmat es un nuevo misil balístico intercontinental pesado que se espera que Rusia despliegue con 10 o más ojivas en cada proyectil, según el Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos.
Ha estado en desarrollo durante años, por lo que su lanzamiento de prueba no es una sorpresa para Occidente, pero llega en un momento de extrema tensión geopolítica debido a la guerra de Rusia en Ucrania.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) de Naciones Unidas dijo este miércoles que el número de refugiados que ha huido de Ucrania desde que Rusia invadió el país, el pasado 24 de febrero, ha superado los cinco millones. Más de la mitad son niños.
fgr
