En medio de la guerra contra Ucrania, Rusia se da la oportunidad de reforzar lazos con gobiernos aliados, pues el presidente ruso, Vladimir Putin, recibió a su homólogo de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en Moscú.
El líder del Kremlin aprovechó la visita del revolucionario para inaugurar una estatua del exmandatario cubano Fidel Castro en la región de Sókol. Dicha figura fue creada por el artista ruso Alexei Chebanenko y mide más de tres metros, además tuvo un costo de más de 300 mil dólares y éstos hecha de bronce.
Durante la ceremonia en una plaza que lleva el nombre del cubano, el mandatario ruso reconoció el legado de Castro como uno de los principales líderes del siglo XX, a quien recordó como un luchador por la justicia y la paz y dijo que con estas acciones se refuerza la relación de amistad de años con la isla.
Cabe destacar que cerca de esta zona hay calles que llevan los nombres de otros líderes latinoamericanos como Salvador Allende (Chile) y Hugo Chávez (Venezuela).
En este viaje, el cubano Díaz-Canel también se reunió con legisladores y hasta emitió un mensaje ante la Duma o Cámara baja. Y a través de redes sociales resaltó el enorme gesto ruso al destacar “jamás a olvidaremos tu mano extendida cada vez que la necesitamos”.
Cabe destacar que Cuba es una de las naciones que ha mantenido el apoyo a Moscú desde la invasión a Ucrania, hecho que se refleja en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pues ha votado igual que Rusia o se abstuvo en las condenas internacionales por la guerra, la anexión y la reciente resolución para que Rusia pague por los daños causados al pueblo ucraniano.
fgr
