Sánchez justifica amnistía rumbo a la investidura

La oposición advirtió que la amnistía no le será suficiente para ganarse el perdón de la población, lo que recuerda la amenaza de convocar a nuevas elecciones

El presidente español saluda a las bancadas, durante el debate de ayer.
El presidente español saluda a las bancadas, durante el debate de ayer.Foto: AP
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El presidente de España, Pedro Sánchez, defendió ante el Parlamento el pacto con independentistas al arrancar el debate para su investidura, acto marcado por la frontalidad de la derecha por “comprar” un Gobierno que no ganó en las urnas.

Previo a la investidura, pues amarró el sí de 179 legisladores, el líder de la Moncloa recalcó que apostó por el entendimiento y el perdón para dejar atrás el conflicto secesionista de 2017 al responder a las críticas del Partido Popular (PP) y Vox.

Apuntó que no se trata sólo de otra gestión sino de una oportunidad para fortalecer la convivencia, en referencia a quienes promovieron el referéndum catalán, pues una mejor España es la que está unida, al tiempo que arreció ataques contra la oposición al culparla de generar odio, tras nuevas protestas que dejaron 14 detenidos, pues dijo que lo que les molesta no es la amnistía sino que perdieron, aunque la derecha obtuvo más votos en julio pasado, pero fracasó para llegar al poder.

Sánchez enfatizó que el Gobierno será resultado de una amplia negociación y no de la imposición, pues ratificó que el pacto, por el que Junts le dará siete votos hoy, era la alternativa ante una derecha “reaccionaria” que insiste en la confrontación.

En respuesta, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, recriminó que venda su plan como urgente cuando en cuatro años jamás lo planteó. Y en el primer cara a cara de este amplio debate, le cuestionó cómo la amnistía pasó de ser inconstitucional a algo permisible, pues el pacto surgió cuando necesita de los independentistas.

Incluso enfatizó que el izquierdista engañó a toda la nación, pues antes de julio no se mencionó tal amnistía, aprovechada por el exlíder catalán Carles Puigdemont, por lo que advirtió a Pedro Sánchez que no lo busque cuando los secesionistas le fallen o lo traicionen.

Postura a la que se sumó Santiago Abascal de Vox al acusar que los cambios gestionados en la última semana representan un golpe de Estado, pero el Congreso lo obligó a corregir y enmendar sus declaraciones incendiarias.

Pero el presidente también enfrentó a los independentistas, pues la líder de ese sector, Míriam Nogueras, lo encaró para ratificar si cumplirá con las mil 486 palabras firmadas en este pacto.