En medio de especulaciones de fracturas internas, el primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, confirmó el adelanto de electoral, como lo filtró la prensa.
“Celebraremos elecciones generales el 4 de julio”, anunció en conferencia sorpresiva luego de convocar en un día inusual a su gabinete, incluso a su ministro de Exteriores, David Cameron, quien se encontraba fuera del país.
Frente al número 10 de Downing Street reconoció que la nación atraviesa uno de los momentos más complicados desde la Segunda Guerra Mundial, en referencia a las crisis económicas y tensiones mundiales por los conflictos de Ucrania —socio al que suministra equipo militar— y de Gaza. Y dijo que ya comunicó la decisión al rey Carlos III para disolver el Parlamento y acelerar los comicios, para los que tendrán poco más de un mes de preparación.
“Es el momento de que Reino Unido elija su futuro”, declaró quien se convirtió en el primer líder británico tras la muerte de Isabel II.
Asimismo, confirmó que disputará de nuevo el cargo al llamar a la población a respaldar al Partido Conservador y no arriesgarse con los laboristas, que según sondeos locales los superan por 20 puntos porcentuales, pues sentenció que éstos no tienen un plan de gobierno, al criticar su postura decisión fáciles.
Por ello, destacó los logros de su corta gestión al enlistar la recuperación económica tras la pandemia de Covid-19, la estabilidad y la normalización de la inflación con mejores índices en comparación con potencias como Francia, Alemania y Estados Unidos, con lo que contradijo a medios que reportaban un nuevo desplome en la materia de hasta 2.3 por ciento, el más bajo en tres años.
Sunak, el primer líder de origen migrante, añadió que el mayor reto desde que tomó las riendas a finales de 2022 fue tomar decisiones complejas al recalcar que su plan está funcionando, en un nuevo intento de llamar a seguir la ruta de las oportunidades y la seguridad económica de los conservadores y no elegir a Keir Starmer, su posible rival.
