El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump planea recibir a cientos de personas en el jardín sur de la Casa Blanca el sábado. Se trata de su primer evento en persona desde que anunció que había dado positivo al COVID-19, según información del diario estadounidense The New York Times.
La organización del evento fue reportado por primera vez por ABC News, revelando que Trump continúa con la postura de usar la Casa Blanca para eventos políticos, como lo hizo durante su discurso en la Convención Nacional Republicana.
De acuerdo con el Times, algunos colaboradores de la Casa Blanca y de campaña de Trump expresaron su preocupación por lo que el Presidente podría decir en sus comentarios en el evento del sábado. Temen que el evento confirme las críticas contra el magnate, quien se ha mostrado arrogante sobre los efectos del COVID-19, que ha provocado la muerte de más de 210 mil estadounidenses.
El evento se producirá sólo dos semanas después de que se celebrara la nominación de la jueza Amy Coney Barrett a la Corte Suprema, el cual, los propios funcionarios de la Casa Blanca consideran que fue el origen del brote de COVID-19 que infectó a Trump, su esposa y al menos otras dos docenas de personas.
Al respecto, el Dr. Anthony S. Fauci, el principal especialista en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, dijo el viernes a CBS News Radio que había habido "un evento en la Casa Blanca" y agregó que las personas que ahí se habían reunido no usaban cubrebocas para protegerse del coronavirus.
Tras contagiarse de COVID-19, Trump esperaba comenzar a viajar para continuar con su campaña este fin de semana, incluso cuando expertos médicos externos expresaron que había incumplido con el aislamiento necesario para evitar la propagación del virus, poniendo en riesgo a más miembros de su gabinete.
Sin embargo, el médico de la Casa Blanca, el Dr. Sean P. Conley, anunció que Trump podría "regresar a los compromisos públicos" de manera segura el sábado.
Al respecto, los expertos médicos externos señalaron que un regreso al público inapropiadamente acelerado de Trump podría correr el riesgo de infectar a otros.
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