Zelenski celebra “buen trabajo” del ejército

Ucrania, a la ofensiva; rival teme caída crítica

Militares de la nación invadida activan despliegue amplio contra el invasor en Bajmut, pero dice que aún no es su contraataque; mercenarios culpan a la Defensa de revés “vergonzoso”

Fuerzas militares lanzan un ataque contra posiciones cercanas a Bajmut, ayer.
Fuerzas militares lanzan un ataque contra posiciones cercanas a Bajmut, ayer. Foto: Reuters

El ejército de Volodimir Zelenski avanzó posiciones en ruta a Bajmut en una nueva ofensiva para recuperar el territorio, mismo que aliados rusos temen perder en menos de dos meses.

Luego de semanas de ajustes, la nación invadida dio pasos importantes para atacar y replegar al rival, hecho que gobiernos afines ven como la antesala de la anunciada contraofensiva, la que Kiev insistió no tendrá aviso previo.

Mientras el Kremlin presumió que frenó nuevas incursiones contra sus bases en regiones anexadas y cerca de su frontera, el defensor reveló que en el día 467 de combates pasó “a la ofensiva en ciertas direcciones” con un despliegue “bastante amplio” por tierra y por mar para arrebatar el supuesto control al enemigo.

El objetivo es forzar la salida de los ocupantes en las provincias cercanas al denominado “epicentro de la guerra”, pues comenzaron combates de menor escala desde el sur en varios frentes para acercarse hacia Avdivka y puntos clave como Vulhedar, donde se cree que se reinstalaron los soldados invasores tras luchas incluso cuerpo a cuerpo, según medios ucranianos.

Sin conocer el resultado total de la estrategia, Zelenski aplaudió la labor de sus tropas al precisar que “nos han dado la noticia que esperábamos”, al resaltar que en Bajmut hicieron un buen trabajo.

Pero el régimen minimizó los golpes de Kiev al recordar que un día antes frustró embestidas de intrusos en Belgorod.

No obstante, poco después el ejército invasor reconoció el riesgo al acusar que ocho batallones rivales se dirigían hacia sus asentamientos, tres más que los detectados una noche antes en zonas fronterizas, y que las fuerzas de Zelenski usaron misiles antirradares en su contra, proyectiles de origen estadounidense.

Ante esta situación, el Kremlin insistió que Zelenski intenta escalar el nivel de la confrontación, mientras las tropas rusas se vieron restringidas para responder, pues éstas confirmaron, según fuentes militares, que perdieron por tiempo indeterminado toda comunicación, lo que complicó una medida espejo inmediata, pero en cuanto pudo Moscú bombardeó zonas civiles en Kiev, Járkov, Jerson y Melitopol y en este último punto destruyeron parte de un gasoducto.

Posteriormente, milicianos rusos aseguraron que al igual que el ejército ucraniano avanzan contra el ofensor al liquidar a un comandante de Belgorod.

Para mostrar el resultado de la negativa de los líderes a intercambiar prisioneros, la Legión de la Libertad de Rusia y el Cuerpo de Voluntarios Rusos puntualizaron que perpetraron un duro golpe al Ministerio de Defensa al eliminar al líder Andrei Vasilevich, quien, aseguran, falleció con las manos cubiertas de sangre hasta los codos.

Incluso, en un mensaje por Telegram compartieron fotografías de su cuerpo tendido en el campo de batalla y documentos que corroboran su identidad.

En tanto, el Grupo Wagner admitió que en la disputa por Bajmut se ven debilitados por malas decisiones del ejército de Putin. El líder del grupo a sueldo, Yevgeni Prigozhin, advirtió que la huida “vergonzosa” detonará la derrota de Rusia y explicó tras salir de este punto que, pese a meses de intensos combates, el invasor no dio el golpe definitivo a Ucrania y, ante sus tibias acciones entre incesantes reclamos por la falta de municiones, estimó que a mediados de julio Kiev recuperará la zona en Donbás.

Ante este revés, se lanzó de nuevo contra el líder del ejército ruso, Sergei Shoigu, al retarlo a luchar en este frente y morir como un héroe, contrario a lo mostrado en los últimos meses.